Las mejores vistas y miradores de Granada

Si algo caracteriza a la ciudad de la Alhambra más allá de sus de sus monumentos o sus ya tradicionales tapas, son los miradores. Granada ofrece un sin fin de oportunidades y lugares inimaginables para contemplar, desde las alturas, la grandeza de la ciudad nazarí. Si quieres aprovechar los próximos días para descubrir las mejores vistas de Granada, aquí te dejamos una lista con los miradores que son cita obligada en la ciudad.

Mirador de San Nicolás

Todo aquel que pase al menos un día en Granada tiene una visita casi obligada al Mirador de San Nicolás. Este es el lugar más emblemático de la ciudad y por lo tanto el más visitado. Ubicado en el corazón del Albaicín, el Mirador de San Nicolás ofrece una panorámica perfecta de la Alhambra, al fondo Sierra Nevada, la ciudad y la Vega de Granada. La zona siempre está animada con multitud de gente y artistas callejeros, pero si quieres disfrutar de las vistas evitando las aglomeraciones es preferible subir a primera hora de la mañana, aunque eso sí, ver el atardecer desde el Mirador de San Nicolás, no tiene precio. 

Mirador Mezquita Mayor de Granada

Justo al lado del Mirador de San Nicolás se encuentra la Mezquita Mayor de Granada. Este mirador es casi desconocido para la mayoría de turistas por lo que es una opción ideal para disfrutar de casi las mismas vistas que en el anterior, pero sin el tumulto habitual de visitantes. Además, La Mezquita Mayor ofrece la visita a sus jardines que permanecen abiertos al público durante todo el año de forma gratuita. 

Mirador de los Carvajales

Este lugar era casi desconocido para muchos visitantes. El mirador se ubica en la Placeta de los Carvajales, situado en la parte baja del Albaicín. Además, se encuentra muy cerca de las calles de las teterías, por lo que es un plan ideal para disfrutar una tarde con amigos o familia dejándote enamorar por los establecimientos llenos de embrujo y sabores. El Mirador de los Carvajales ofrece una vista diferente de la Alhambra, desde un punto más bajo, pero igual de espectacular. 

Mirador de San Cristóbal

Pasando a la parte alta del Albaicín, el mirador se sitúa al lado de la Iglesia de San Cristóbal y ofrece una vistas mágicas y embaucadoras de Sierra Nevada al fondo, la catedral, el Palacio de Dar al-Horra, la Alhambra asoma tímidamente e incluso se puede contemplar parte del propio barrio del Albaicín. Este mirador se encuentra en la Carretera de Murcia, pero se puede acceder a él caminando por la Cuesta de Alhabaca desde el Arco de Elvira, o por la Cuesta del Chapiz.

Mirador de San Miguel Alto

Este se considera el mirador más elevado de toda la ciudad, un lugar espectacular desde el que contemplar la ciudad nazarí en todo su esplendor. La ciudad al completo, la sierra y la Alhambra a tus pies. Además, este mirador es uno de los mejores lugares para poder disfrutar de un atardecer de ensueño. Para llegar hasta él tienes varias opciones. Puedes optar por hacer algo de ejercicio y subir andando por un sendero de tierra que rodea la ladera sobre el Albaicín, eso sí tendrás que tirar de gemelos porque el camino no es precisamente un paseo. Otra de las alternativas es coger la línea de autobús N9 o subir en coche o taxi. Sea como fuere, al igual que el Mirador de San Nicolás, el de San Miguel Alto también es una visita de obligado cumplimiento.

 

El ojo de Granada

Granada tiene la peculiaridad de que, más allá de los miradores conocidos, existen muchos lugares con una vistas increíbles que encuentras al perderte caminando por sus calles. Este es el caso de El Ojo de Granada. Se sitúa cerca de la Calle Elvira, a pocos minutos de la Catedral, un lugar desde el que se puede contemplar La Catedral, parte de la vega y los tejados de la ciudad, desde un punto con bastante altura. 

La Silla del Moro

Este lugar es para aquellos a los que le guste pasear y rodearse de naturaleza. Para llegar a la Silla del Moro se puede acceder en coche y dejarlo en el parking de la Alhambra, pero lo recomendable es subir caminando para dejarte enamorar por el oasis de paz que supone la montaña en mitad de la ciudad. Se puede acceder desde la Cuesta de los Chinos o por el Bosque de la Alhambra.

La ruta comienza por las espaldas del Generalife, pasando por el Llano de la Perdiz hasta llegar a la Silla del Moro. Es un camino algo empinado, pero el esfuerzo merecerá la pena ya que se puede observar una perspectiva totalmente diferente de la Alhambra y la ciudad nazarí.

Desde el Camino del Sacromonte, vía que recorre uno de los barrios más conocidos de la ciudad, os encontraréis con el Mirador de Sacromonte o la Placeta de la Vereda de Enmedio. Un lugar espectacular desde el que se puede contemplar una panorámica perfecta de La Alhambra y el Generalife, la Silla del Moro, el Albaicín y el centro de la ciudad. Además, paseando por este famoso barrio granadino encontraréis las peculiares casas-cueva y podréis visitar la Abadía del Sacromonte.