20 millones de yemeníes en peligro de muerte por desnutrición y enfermedad
Por el bloqueo saudí
El bloqueo naval sobre Yemen impuesto por Arabia Saudí, que lidera la coalición internacional que se enfrenta a los rebeldes huthis, amenaza con matar de hambre a 20 millones de yemeníes, aproximadamente el 80 por ciento de la población, según temen organizaciones humanitarias, así como Estados Unidos y Reino Unido, que han pedido sin mucho éxito al reino árabe que modere sus tácticas y entregue la ayuda económica que prometió a la gente.
"Cada vez se cubren menos necesidades básicas", ha declarado el gestor de programas humanitarios de Oxfam, Nuha Abdul Jabber, al diario británico 'The Guardian', al que describe un escenario dantesco. "La gente se está muriendo de enfermedades sencillas porque los hospitales se están quedando sin diesel para funcionar y bienes básicos como la harina no pueden entrar", ha añadido.
El bloqueo -- que también está en vigor por tierra y aire-- afecta principalmente al puerto de Al Hudaya, en la costa oeste del país, y el único todavía en funcionamiento, al que solo llega una pequeña porción diaria del contingente de ayuda destinado a la población yemení. La mayoría de los barcos son obligados a esperar durante días mientras los soldados saudíes registran su interior en busca de armas.
Estos registros son indiscriminados y arbitrarios. "A veces entran en lso barcos, a veces no", indican a 'The Guardian' fuentes del puerto. "Los saudíes suelen ser más flexibles pero los egipcios no pasan ni una", añaden. Arabia Saudí prometió hace semanas a agentes de enlace de la Marina británica que cambiaría su estrategia para limitar sus búsquedas, a través del filtro que supondría la información proporcionada por sus servicios de Inteligencia, a aquellos barcos sospechosos de transportar armas. Sin embargo, Riad no ha cumplido esta promesa.
Por ello, la economía de Yemen, frágil de por sí, ha quedado totalmente estrangulada. Ahora solo entra un 15% por ciento del volumen de importaciones registrado antes de la guerra, con el agravante particular de que el país debe recurrir a la compra masiva de bienes al extranjero (de hecho, un 90 por ciento de su comida procede de fuera).
Arabia Saudí también ha incumplido la promesa realizada a Naciones Unidas de ayudar económicamente a la población. Riad se comprometió el pasado mes de abril a financiar por completo un fondo de ayuda de emergencia para Yemen estimado en 274 millones de dólares de los que la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) no ha visto ni un céntimo.
BLOQUEO INSALVABLE
Y mientras, dos petroleros con 70.000 toneladas de diesel han sido obligados a dar media vuelta y a repartir su combustible entre barcos más pequeños para facilitar el registro. Al final, solo termina entrando en Yemen menos de una décima parte del diesel que requiere mensualmente el país -- cinco millones de toneladas--, lo que ha obligado a cerrar hospitales en al menos 18 de las 22 provincias del país; un total de 153 centros que distribuían alimentos entre 450.000 niños, ahora en peligro.
"Los niños se están muriendo en Yemen. Muertes que se podrían haber evitado", lamenta la directora de programas en Yemen de Save the Children, Priya Jacob. "La crisis humanitaria en Yemen ha degenerado rápidamente en una situación que, al final, ha provocado que cuatro de cada cinco yemeníes acaben necesitando ayuda urgente".
"Y aquí no hemos visto nada de los muchos compromisos internacionales que hemos escuchado sobre Yemen", lamenta Abdul Jabber. "Y este es el momento del que el mundo comprenda la gravedad de esta situación", concluye.