A juicio este lunes el joven acusado de asesinar a una anciana cuando fue a robar en su casa
El fiscal solicita que, una vez cumplidos los 25 años de cárcel, se imponga al acusado una medida de libertad vigilada que consista en la obligación de estar siempre localizable mediante aparatos electrónicos que permitan su seguimiento permanente
La Sección Primera de la Audiencia de Granada acoge este lunes el juicio contra un joven acusado de asesinar a una anciana octogenaria estrangulándola en su vivienda de Granada cuando entró para robarle tras saber que vivía sola, hechos por los que se enfrenta a una petición fiscal de 25 años de prisión.
El acusado, un joven marroquí de 22 años que permanece en prisión provisional por estos hechos, será enjuiciado por un jurado popular acusado de un delito de robo con violencia y otro de asesinato.
Los hechos se remontan al 20 de marzo de 2018, cuando el acusado, Mohamed C., se presentó en casa de la mujer, que entonces tenía 88 años, consciente de su avanzada edad y de que vivía sola, pues lo oyó comentar a un conocido que trabajaba en un supermercado que solía llevarle la compra, según consta en el escrito de acusación provisional de la Fiscalía, al que ha tenido acceso Europa Press.
El acusado llamó a la puerta y la anciana, de nombre María, le abrió, momento en el que le propinó un fuerte empujón que la dejó semiinconsciente en el suelo, lo que aprovechó para registrar las dependencias de la casa.
La mujer recuperó el sentido y trató de pedir auxilio a través del botón de teleasistencia o 'botón del pánico' ubicado en el salón de la vivienda, pero el acusado se percató y fue hacia ella. Le agarró del cuello y acabó estrangulándola, ocasionándole la muerte de forma instantánea. Seguidamente arrastró el cuerpo desde el salón hasta la sala de estar y la dejó en el suelo, con la espalda apoyada sobre la parte inferior de un sillón.
Después siguió registrando todas las dependencias de la casa, apoderándose del dinero que encontró. Aunque intentó quitar a la víctima un anillo aprovechando que yacía muerta no lo consiguió, cogió un juego de llaves de la vivienda y se fue cerrando la puerta con llave.
El fiscal solicita que, una vez cumplidos los 25 años de cárcel, se imponga al acusado una medida de libertad vigilada que consista en la obligación de estar siempre localizable mediante aparatos electrónicos que permitan su seguimiento permanente.