"Las familias nos dicen que reciben mucho más de lo que dan a los menores acogidos"

La familia es un pilar esencial en la vida de todo niño, un derecho fundamental que determina el desarrollo del menor en todos los ámbitos. De los miembros de ella es de quienes toma a sus referentes y donde aprende y define lo que será su vida en un futuro. Lamentablemente, no todos los niños y niñas tienen la suerte de poder crecer en un ámbito familiar que cuente con unas condiciones favorables para ellos. Por suerte, existen centros y asociaciones que ayudan a estos menores a conseguir sus sueños y les brindan la oportunidad de tener una vida mejor. La Asociación Andaluza de Centros Católicos de Ayuda al Menor (ACCAM) es una de las entidades que trabaja desde 1999 en el ámbito de protección de los menores de toda Andalucía. En concreto, en la provincia de Granada cuenta con seis centros de acogida. En ellos realizan programas específicos y propios con el objetivo de sensibilizar a la sociedad, en especial a las familias que se plantean acoger.

Campaña 'Se busca'

ACCAM lleva desarrollando el programa 'Se busca'  desde marzo de este mismo año, el cual es financiado a través de una subvención en concurrencia competitiva del 0,7% de IRPF de la Junta de Andalucía. El pasado martes, tuvo lugar un encuentro para familias colaboradoras en el Hotel Abades Nevada Palace, al que asistió la delegada territorial de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, Matilde Ortiz, junto a miembros de la asociación y otros profesionales. El evento consistió en una mesa redonda que recogió los testimonios del proyecto desde el punto de vista más técnico de las trabajadoras sociales, hasta la parte más humana y emotiva de aquellas personas que son y han sido protagonistas de esta historia.

Rocío Escudero es una joven extutelada que perteneció a uno de los centros de acogida de ACCAM. Llegó con nueve años y menos de cinco años después tuvo la "suerte", como ella misma lo define, de poder salir del centro con una familia colaboradora. "Primero empezamos a pasar el día entero para conocernos, luego los fines de semana y las vacaciones, hasta que se me presentó la oportunidad de poder irme con ella para tener una vida". Así habla Rocío de la que, gracias al centro, se convirtió en su familia, con la que a día de hoy convive. Para ella, tener una familia es un apoyo esencial y participar en este programa ha sido una de las mejores experiencias de su vida. Hay cada vez más familias dispuestas a colaborar con este propósito, pero cree que podrían ser muchas más. Desde su experiencia anima a todas las familias a participar porque asegura que "no se van a arrepentir y hay muchísimos niños que lo necesitan".

El objetivo del programa 'Se busca' es que los menores pasen tiempo con las familias colaboradoras durante los fines de semana o las vacaciones y, de esta forma, vayan estableciendo un vínculo y puedan tener la oportunidad de pertenecer a una familia, aunque sea de una forma algo distinta. Una de las madres colaboradoras es María Pía, quien junto a su marido y a sus tres hijos tomaron la decisión de acoger hace unos años. "Mis hijos aprendieron así más de lo que sus padres les podíamos dar", expresa, ya que para su familia fue una experiencia "enriquecedora" como colaboradora  donde crecieron y aprendieron juntos lo que significa compartir. "Es tanto sin gran cosa lo que podemos aportar que yo creo que merece la pena", asegura.

Aún habiendo muchas experiencias con final feliz como las de Rocío o María Pía, son todavía muchos niños y niñas los que, por desgracia, no tienen una situación tan favorable. Según datos aportados por la directora técnica de ACCAM, Amparo Cazorla, hay 38 familias colaborando actualmente en Granada. Pero de la misma manera, insiste en que hacen falta más familias, en especial de cara a las fiestas navideñas que están a la vuelta de la esquina. En concreto, ha señalado que se están buscando a 27 familias dispuestas. "Soñamos con poder ofrecer una infancia más feliz y un mundo mejor", indica.

¿Qué requisitos hacen falta para acoger?

Lo principal para poder acoger a los menores que lo necesitan es estar dispuesto a darle el futuro que merece. Todo mayor de 25 años que no tenga suspendida o no haya sido privado de la patria potestad por sentencia judicial firme puede acoger. Por supuesto, es indispensable que las personas que quieran hacerlo dispongan de las capacidades y habilidades adecuadas para adaptarse a las necesidades que pueda presentar el menor durante el transcurso de la convivencia.

Una vez se comprueba el cumplimiento de lo anterior, las personas interesadas deben rellenar la solicitud de ofrecimiento y entregarla en la Delegación Territorial de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de la Junta de Andalucía o mediante ACCAM. La solicitud puede ser genérica o para un menor en concreto. Se lleva a cabo la valoración de las personas solicitantes, mediante un informe de aptitud, basado en entrevistas y visitas domiciliarias.

Tras ello, se realiza una primera entrevista para conocer a la familia propuesta. La Administración, junto con otros profesionales, se encarga de la selección de las familias que mejor respondan a las necesidades para poder llevar a cabo la selección.

Posteriormente, se realizan informes de seguimiento de las familias colaboradoras. Los profesionales de ACCAM asesoran en todo momento a las familias antes y durante el proceso de colaboración, al igual que les brindan una formación, tanto de forma previa como a lo largo de la misma, además de estar implicados en dar a conocer el recurso a través de campañas.