Aceite de coche: qué es y cómo elegir el mejor aceite para tu coche

Su función principal es evitar el desgaste que se produce en los diferentes componentes del motor

Caravana de coches atasco bajada a la playa
Circulación de vehículos | Foto: Archivo
Gabinete
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El aceite de motor es un elemento básico en el funcionamiento de un coche y tiene una labor diaria muy esencial. Su correcto uso no solo permite que el vehículo circule con normalidad, también ayuda a prolongar la vida útil de muchos de los componentes que están directamente ligados a su aplicación. Conocer qué es el aceite de coche, para qué sirve y cómo elegir el modelo adecuado supone una gran ayuda para mantener el motor y muchas de las piezas en perfecto estado, de manera que se alcanza una conducción natural y libre de riesgos.

La función principal del aceite del coche es evitar el desgaste que se produce en los diferentes componentes del motor, fruto del rozamiento que se produce con la circulación. Esta reducción de la fricción permite que las piezas se mantengan operativas durante un mayor periodo de tiempo, además de optimizar todas las posibilidades de las mismas; ya que el deterioro implica un déficit en el funcionamiento, lo que obliga a realizar una sustitución antes de tiempo. El aceite, además, tiene un efecto frío en el motor, de manera que impide que la temperatura suba por encima de unos niveles máximos, fruto de esta rozadura que se produce de forma continua y a un nivel muy elevado cuando el vehículo está en marcha.

El empleo de este producto es, asimismo, una herramienta para controlar el riesgo de corrosión, una consecuencia habitual en los coches. Por otro lado, presenta una función de limpieza, ya que impide que todos los residuos que se generan se esparzan por todo el motor y puedan dañar a sus componentes.

El aceite de motor es, por lo tanto, un producto vital para que el coche funcione correctamente. A sus efectos de mantenimiento en el medio y largo plazo, se suma el hecho de que es un líquido que garantiza que prácticamente todas las piezas del motor trabajen correctamente y de forma óptima, en las diferentes condiciones climáticas que se puede encontrar a lo largo del año.

Elegir el mejor aceite

La elección del tipo de aceite depende, principalmente, del modelo de coche; ya que en función de sus características se emplea una u otra opción. Hay otros factores que también influyen en esta decisión, como el clima o la frecuencia de kilómetros realizados. El primer paso para saber qué aceite elijo para mi coche es acudir al manual de instrucción y comprobar la homologación del fabricante, ya que es la referencia que confirma que un tipo de aceite determinado se ajusta a dicho vehículo. El modelo elegido también influye en el periodo de cambio, pues puede presentar importantes variaciones entre cada uno.

La viscosidad es otro factor determinante para elegir el aceite. El indicativo W hace referencia al trabajo en frío (en el arranque) y el siguiente número explica cómo funciona cuando el motor está caliente, es decir, durante la conducción. El tipo 10W-40 es habitual en los coches de mayor edad, que han alcanzado los veinte años. Otros aceites muy comunes son los modelos 5W-30 y 5W-40, que se emplean para los motores que realizan muchos kilómetros. Están optimizados para prolongar su uso durante un largo periodo.