Acepta cinco años de prisión por apuñalar a un menor, amigo del ex de su pareja

Según la acusación de la Fiscalía, el procesado había estado recibiendo insultos del exnovio de su entonces pareja y este amigo

Guardia-Civil-Juzgados
Juzgados | Foto: archivo
E.P.
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El joven de 21 años acusado de intentar matar con un cuchillo jamonero a un menor de edad, de 14, amigo del exnovio de su pareja, tras una discusión motivada por esa relación sentimental en el entorno de la estación de autobuses de Granada capital, ha aceptado este lunes los hechos y cumplir una condena de cinco años de prisión.

La Fiscalía de Granada solicitaba inicialmente para el procesado siete años de prisión por la posible comisión de un delito de homicidio en grado de tentativa acabada, si bien un acuerdo con la defensa ha propiciado una rebaja en la petición de condena y ha evitado la celebración del juicio previsto en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Granada.

Concretamente, la abogada del joven y la representante del Ministerio Público han acordado una rebaja en su solicitud de pena, hasta los cinco años de prisión, que incluye una prohibición de acercarse a la víctima, por el mismo delito, y con una indemnización al menor de 7.000 euros.

Tras el acuerdo entre las partes, el juicio ha quedado visto para sentencia, que irá en consonancia al consenso entre defensa y acusación pública.

Según la acusación de la Fiscalía, el procesado había estado recibiendo insultos del exnovio de su entonces pareja y éste, además, lo intentaba amedrentar a través de llamadas telefónicas y mensajes en las redes sociales.

En el curso de la "escalada de insultos e incitaciones", quedaron la tarde del 17 de julio de 2014 en la calle Julio César, a espaldas de la estación de autobuses de Granada, con el fin de hablar sobre el tema.

Así, acudieron al lugar previsto, dos grupos de amigos, unos del acusado, y otros del exnovio de su pareja. El procesado fue acompañado por su novia y otro amigo, y el exnovio con otros cuatro amigos.

El inculpado, "harto de los mensajes recibidos y de la presión verbal que estaba sufriendo" por parte del exnovio de su entonces pareja, decidió llevar consigo un cuchillo jamonero de 27 centímetros de longitud de hoja, que introdujo en una mochila de color azul que portó en todo momento consigo.

Al llegar sobre las 19,00 horas al lugar convenido, uno de los amigos del acusado se acercó al exnovio de la chica, quien estaba acompañado por el menor de edad, y dirigiéndose a éste le dijo que sólo iban a hablar. Sin embargo, el procesado, que no había intervenido aún en conversación o discusión alguna, se aproximó inmediatamente a ellos y, sacando el cuchillo de la mochila tras encararse contra el menor, lo blandió ante él y le propinó una cuchillada en la pierna izquierda.

Ante esto, el menor se dirigió a él, "atónito por su proceder" y le dijo "¡Pero qué haces!", momento en el que el joven inculpado, "con propósito de acabar con su vida", dirigió nuevamente el cuchillo hacia él y le asestó una nueva puñalada en la zona abdominal izquierda, que le ocasionó una laceración del bazo y del riñón izquierdo. La lesión supuso un "riesgo vital" para la víctima, por comprometer la dinámica de ventilación y de riego sanguíneo, amén de por la afectación de órganos y vísceras, con peligro de hemorragia interna.

Tras la agresión, el inculpado se dirigió corriendo hacia la estación de autobuses, donde se desprendió en el estacionamiento del cuchillo. Finalmente fue detenido por la Policía Nacional en el hall del recinto corriendo y vomitando, y puso como pretexto que le estaban persiguiendo y que querían matarlo. Testigos presenciales del grupo lo reconocieron tras su arresto.