Agentes de Medio Ambiente intervienen 17 ejemplares de dos especies protegidas de moluscos marinos
Ambas especies se encuentran catalogadas como vulnerables dentro de los registros nacional y autonómico
Agentes de Medio Ambiente de la Junta se han incautado en un establecimiento de restauración de 17 ejemplares de dos especies protegidas de moluscos cuya presencia en los fondos marinos andaluces es cada vez más escasa.
Se han decomisado un total de 13 ejemplares de un tipo de caracola llamada 'Charonia lampas', considerada el gasterópodo con el caparazón de mayor talla del Mediterráneo --puede alcanzar los 40 centímetros--, y de cuatro bivalvos pertenecientes a un tipo de nacra de la familia 'Pinna nobilis', uno de los moluscos con la concha más grande del mundo, que puede alcanzar hasta un metro de longitud, y que incluso puede albergar perlas.
Según ha informado la Delegación del Gobierno andaluz en Granada, ambas especies se encuentran catalogadas como vulnerables dentro de los registros nacional y autonómico de especies amenazadas y su presencia es cada vez menor en los fondos marinos de Andalucía al tratarse de variedades muy llamativas por su tamaño extraordinario, y muy apreciadas también por los coleccionistas que las recogen como objetos decorativos.
Además de su extracción ilegal a lo largo de toda la costa para uso decorativo o para el consumo de su carne, "el retroceso de estos invertebrados está vinculado también a la captura accidental por la pesca de arrastre, que merma su presencia y hace que las poblaciones estén cada vez más fragmentadas en las costas andaluzas".
Desde la Delegación de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta en Granada se ha apelado, en este sentido, a "la concienciación ciudadana sobre la importancia de estas especies en el ecosistema submarino de nuestras costas y han incidido en la degradación irreversible que supone para estos ricos hábitat la progresiva desaparición de invertebrados como éstos".
Medio Ambiente seguirá reforzando las labores de control, vigilancia y prevención del furtivismo, realizando además de forma periódica inspecciones en mercados, comercios, bares y restaurantes con la finalidad de detectar la tenencia de especies capturadas y adquiridas por cauces ilegales y que, además, no han pasado por los debidos controles sanitarios.