Los agricultores alzan la voz ante el desplome de los precios

El campo ha dicho basta. Las protestas de los agricultores por la bajada del precio de sus productos tiene ya un largo recorrido, pero ahora con la pandemia, la situación se complicada cada vez más. Un grupo de trabajadores se ha dado cita en la N-340 para tirar a la carretera miles de pepinos en señal de protesta por el asfixiante panorama económico que están afrontando. Desde fuera puede parecer una injusticia que se "desperdicie" tanta comida, pero para los agricultores es ya una medida desesperada.

Mientras que estos trabajadores venden el pepino a unos diez céntimos el kilo, en las grandes superficies el consumidor lo compra a más de dos euros. Si a esta desorbitada diferencia de precios se suma que el coste de producción de este alimento se sitúa entorno a los 40/50 céntimos, con su venta solo se está perdiendo dinero.

Los agricultores denuncian que el sector primario está muriendo lentamente y no se está haciendo nada por ayudarlo y poder vender a unos precios justos. Granada es una de los principales focos de producción del pepino holandés, junto con Almería, por ello se espera que se repitan estas protestas en ambas provincias.