El alcalde anuncia el "cumplimiento exhaustivo" de la ordenanza de la convivencia contra las despedidas
Paco Cuenca recuerda que alcanzar las condiciones ambientales óptimas "implica asumir también los deberes de la solidaridad, el respeto mutuo y la tolerancia"
Europa Press
El alcalde de Granada, Paco Cuenca, ha anunciado este miércoles en un bando que el Ayuntamiento ha encargado a la Policía Local el "cumplimiento exhaustivo" de la ordenanza municipal de la convivencia ante el auge de las despedidas de soltero ante la próxima llegada de la primavera, "al objeto de erradicar conductas inadecuadas que perturben la seguridad ciudadana, haciendo hincapié en las infracciones", con multas de hasta 3.000 euros para las muy graves.
Así consta en el bando publicado este miércoles, en el que Cuenca explica a los vecinos que la ciudad es "un espacio colectivo en el que todas las personas tienen derecho a encontrar el espacio para su realización personal, política, social, con las condiciones ambientales óptimas, lo cual implica asumir también los deberes de la solidaridad, el respeto mutuo y la tolerancia".
Por ello, hay que "preservar el espacio público como un lugar de convivencia y civismo, en el que todas las personas puedan desarrollar en libertad sus actividades de libre circulación, de ocio, de encuentro y de recreo, con pleno respeto a la dignidad y a los derechos de los demás y a la pluralidad de expresiones y de formas de vida diversas existentes en Granada".
Así se refuerza, en la línea de lo expuesto en la comisión de Protección Ciudadana del Ayuntamiento este pasado martes, el control para evitar "el consiguiente perjuicio para la ciudad y sus habitantes de la ciudad de Granada" que pueda acarrear este tipo de celebraciones.
En la misma línea, a preguntas de los periodistas, la edil de Protección Ciudadana de Granada, Raquel Ruz, ha señalado que se trabaja también en avanzar en el control de los pisos turísticos que se alquilan para despedidas, provocando en ocasiones quejas por ruidos entre los vecinos.
Se pretende también, ha proseguido Ruz, un "acuerdo" establecimientos de ocio en orden a que, como el mandato pasado y en el ejercicio de su derecho de admisión, puedan limitar si lo ven conveniente el acceso a estas celebraciones, si no "cumplen con la conducta y el decoro debidos".
