Alhambra Nievas: "Nunca he pensado que algo podía ser más difícil por el hecho de ser mujer"
En julio, la árbitra granadina viajará a San Francisco para pitar la competición femenina en el Mundial de Rugby a 7, en el que estará la selección española
“Me pillas embarcando. Hablamos en una hora”, respondía Alhambra Nievas a nuestra llamada. La árbitra de rugby vive en un no parar. Hace dos fines de semana andaba por París, pitando la última de las series mundiales de rugby 7. Este pasado fin de semana ha estado dirigiendo el último partido de playoff para el ascenso de rugby a 15 de la División de Honor femenina en Madrid. En julio cruzará el charco en avión, rumbo a San Francisco, para arbitrar varios partidos del Mundial de Rugby a 7 femenino, en el que se enfrentan 16 equipos, entre ellos, el de la selección española, también llamadas ‘Las Leonas’, en clara alusión al escudo de la Federación que llevan en sus camisetas. Luego, ya sí, se quedará por la zona para unas merecidas vacaciones en las que tiene previsto visitar el Gran Cañón del Colorado, entre otros reclamos turísticos estadounidenses.
Pero la agitada agenda de compromisos deportivos no ha impedido que Alhambra Nievas, la elegida como mejor árbitra de rugby del mundo en 2016 por World Rugby -la Federación Internacional del deporte oval-, pueda acompañarnos en el evento de nuestro 15 aniversario en el Palacio de los Córdova. Esta granadina, de la que todos nos sentimos especialmente orgullosos, a los pies del monumento al que su nombre hace referencia, estará presente en el encuentro, conducido por el periodista Fernando Díaz de la Guardia, en la que no le faltará ningún detalle y sorpresa. Para la ocasión contamos con el apoyo de nuestros patrocinadores (Bankia, Emasagra, Oximesa, Grupo Trevenque, Cervezas Alhambra, Rossellimac, HispaColex Servicios Jurídicos, Centro de Formación Profesional Reina Isabel, Alsur y Borraja) y de nuestros colaboradores (Junta de Andalucía, Ayuntamiento de Granada, Diputación de Granada, Puleva, Otero, Fundación CB Granada, RCK, Indese Mercedes y Doctortrece).
En este encuentro, donde la comunicación será eje vertebrador, compartiremos experiencias y ahondaremos en su etapa profesional como árbitra que, pese a ser corta, ya puede presumir de haber conseguido convertirse el pasado año en la Mejor Árbitra del Mundo.
Hace casi 6 años, en 2012, colgó las botas para dedicarse a pitar, y dos meses después ya estaba como asistente a las series mundiales de rugby a 7. Desde entonces no ha parado de progresar. Debutó en el Eden Park de Auckland arbitrando a las All Blacks (Nueva Zelanda) en 2013. Un año después se convirtió en la tercera mujer en dirigir una final de la Copa del Rey masculina. Tras más encuentros internacionales, Alhambra ya tenía luz propia y destacaba, pero, sin duda, tal y cómo nos confesó en nuestra última entrevista, su paso por los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro (2016) fue uno de los mejores momentos de su carrera, pitando la final olímpica y llevándose el balón de aquel partido. Pero Alhambra no esconde sus ganas de volver a ponerse las botas y marcarse una melé, pelear en un ruck o anotar un ensayo.
A Alhambra Nievas no hay reto que se le resista. Lo pudimos comprobar recientemente cuando, de la mano de la diseñadora Pilar Dalbat, otra de nuestras invitadas especiales en nuestro evento, fue modelo por un día, en una puesta en escena a la que Dalbat ya nos tiene acostumbrados, aunque cada desfile, cada colección, sigue dejando con la boca abierta. Y así fue como la árbitra se vistió una de las prendas de la nueva colección de invierno 2019 de la diseñadora granadina, que lució en el Museo de Bellas Artes de Granada, junto a más mujeres granadinas, referentes en diversos campos. “Fue muy especial, sobre todo por el cariño y la visión que pone Pilar a sus colecciones. Lo pasamos muy bien y es una alegría poder hacer este tipo de sinergias con mujeres granadinas que, cada una desde nuestros ámbitos, luchamos por nuestra pasión y le ponemos mucha energía a todo lo que hacemos”.
El deporte no es un camino de rosas y Nievas sabe perfectamente definir cuáles son las piedras. “Un mal partido puede ser algo duro, pero lo que a personalmente a mi más me cuesta es estar alejada de la familia y amigos. Con este ritmo de vida, cuesta dedicar tiempo a uno mismo y a los tuyos”, apostilla al otro lado del teléfono.
Muchos definen a Alhambra Nievas como un ejemplo en materia de igualdad de género en el mundo del deporte. ¿Te ves así? “Nunca lo he hecho con esa intención. Yo he recibido una educación en igualdad y nunca he pensado que algo podía ser más difícil por el hecho de ser mujer”. Alhambra sí considera que el hecho de que su historia y trayectoria se haya visibilizado ha sido positivo para naturalizar algunas percepciones erróneas, “para que tengamos una igualdad más asumida y real”.
Le preguntamos sobre el periodismo deportivo y su enfoque con las deportistas. ¿Hemos mejorado los periodistas a la hora de visibilizar los éxitos de mujeres deportistas? Resopla. “No es fácil contestar a esa pregunta. Depende mucho del medio”, responde. Alhambra asegura que ha visto de todo, aunque ella se ha sentido muy arropada por los medios locales, sobre todo los de Granada y Málaga, que la hemos seguido de cerca. “Los medios locales sí que están contando más historias y se muestran más concienciados con el deporte femenino. Lo han visibilizado y han dado seguimiento a muchas historias, pero sigue habiendo una parte de la prensa que saca pocas noticias de deporte femenino e, incluso, que a veces son orientadas de una forma que yo no termino de entender, como objetos, una imagen más de mujer sexy que deportista”, argumenta.
Si en algo nos parecemos a la árbitra granadina es en el trabajo constante para crecer profesionalmente en un camino complicado y competitivo, aunque lleno de grandes satisfacciones. Por eso, para finalizar esta pequeña charla antes de reencontrarnos con ella el próximo 26 de junio, Alhambra Nievas nos lanza su mejor deseo: que mantengamos vivos nuestros principios y que sigamos dándole visibilidad al deporte granadino, y también al femenino.