Altos y bajos de un año político marcado por el coronavirus en Granada

El año 2020 ha sido un año movido, y no solo por la situación derivada de la pandemia del Covid-19. En el ámbito político las aguas también han estado revueltas. Juicios, dimisiones y críticas entre unos y otros partidos se han sucedido a lo largo de los últimos 12 meses, si bien es cierto que algo de consenso se ha logrado aunque solo haya sido para sacar adelante unos presupuestos para la ciudad que estaban paralizados desde hacía cinco años.

Comenzaba este año con el escándalo que provocó la dimisión de Sebastián Pérez como presidente provincial del Partido Popular. El 31 de enero será un día que Pérez nunca olvidará porque fue cuando tuvo que decir basta ante las continuas discrepancias que mantenía con las direcciones regional y nacional de la formación. Dieciséis años estuvo en el cargo y un año como primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Granada, puesto al que también renunció tan solo nueve meses después -el 30 de octubre-. El motivo que alegó es que había sido “cuestionado y suplantado de manera permanente” en sus competencias y no quería “sostener esta situación injusta y arbitraria ni un minuto más”, si bien continúa con su acta de edil.

Le sucedieron como presidente provincial el delgado del Gobierno de la Junta en Granada, Pablo García, -que, en aquel momento era secretario general del partido y que, a su vez, en septiembre fue sustituido por el alcalde de Alhendín, Francis Rodríguez-. El concejal de Economía, Urbanismo, Obras Públicas y Empresas Participadas de Granada, Luis González, asumió la primera tenencia de alcaldía en el Consistorio.

Unos movimientos en las aguas políticas que han hecho tambalearse al equipo de Gobierno de Luis Salvador con una hipotética moción de censura que finalmente no se ha llevado a cabo. Lo que sí se ha cumplido ha sido el primer aniversario con este nuevo bipartito Cs-PP a cargo de la gestión de la ciudad. Y todo ello pasando, además de por todo el culebrón político-social con el que comenzaba su mandato, por una crisis económico-sanitaria que esperemos que comience a remontar una vez se hayan vacunado todos los ciudadanos contra el Covid-19.

Pero si algo bueno ha traído este coronavirus, al menos a este contexto en el que nos ubicamos de momento, es que los políticos de nuestra ciudad han conseguido ponerse de acuerdo para sacar adelante unos presupuestos municipales que llevaban prorrogados desde 2015. Así, en el documento aprobado el pasado 31 de julio, se recoge un gasto de en torno a los 280 millones de euros y unos ingresos previstos de 287 millones, lo que, según las palabras del propio Salvador tras salir de ese pleno, "permitirá hacer frente con mayores garantías a las necesidades económicas y sociales sobrevenidas como consecuencia de la pandemia".

También a nivel político, este equipo de Gobierno ha tenido otras de las que se pueden considerar como 'grandes victorias'. Una de ellas, por ejemplo, la finalización de la Segunda Circunvalación de Granada que, según el alcalde, ha sido posible gracias a la "obstinación y persistencia de su partido" -Ciudadanos-. Una vía de unos 30 kilómetros que, a partir del pasado 16 de diciembre, aliviarán el tráfico de la Primera Circunvalación, que se calcula que ronda los 150.000 vehículos. Tan necesaria era esta infraestructura para la provincia, sobre todo para los vecinos de El Chaparral y del Suspiro del Moro que, en sus trayectos entre la Costa Tropical y la Meseta Central, o viceversa, ya no tendrán que pasar por el cuello de botella del anillo interior.

Pero cierto es que tanto vehículo circulando por los alrededores de nuestra ciudad han convertido a Granada en la tercera ciudad con mayores niveles de contaminación de España, por detrás de Barcelona y Madrid. Por ello, también desde el Ayuntamiento de Granada se puso en marcha el proyecto medioambiental más ambicioso de Granada: el 'Anillo Verde', paralizado a mediados de año por la pandemia del Covid-19 y que se volvió a poner en marcha la semana pasada con la plantación del primero de los más de 200.000 árboles que se plantarán hasta finales de 2030.

Unos ejemplares de olmos, almeces y especies autóctonas para la parte urbana y encinas, robles y enebros, que se destinarán a la reforestación, y que ‘capturarán’ más de 200.000 toneladas de CO2 en el periodo medio de vida de un árbol, que son 40 años. Con lo que el total de dióxido de carbono ‘capturado’ cada año ascendería a 1.509 toneladas, una cifra considerable cuyo equivalente sería una absorción o captura de los contaminantes emitidos por 1.010 automóviles.

Y hablaba al principio de esta crónica, que el 2020 político también ha estado marcado por algunos pases por los banquillos de personalidades que hace tiempo dejaron la primera línea de la política, esto es, el que fuera alcalde de Granada, José Torres Hurtado, así como la que fuera concejal de Urbanismo durante su mandato, Isabel Nieto. Aunque parece que los vientos están a su favor y las posibles irregularidades que hubiera en la adjudicación del derecho de superficie con opción a compra de la Casa Ágreda o en la reforma realizada en el Registro de la Propiedad 6 de Granada, ubicado en la calle Tórtola -conocido como el 'Expediente Registrador' del 'caso Nazarí'- han quedado archivadas por la Audiencia provincial. Un alivio imaginamos tanto para Torres Hurtado como para Nieto.

Protestas y manifestaciones

Pero ahí no termina el 2020. Porque si los dirigentes políticos han tenido que hacer frente a sus propios demonios internos dentro de los partidos, fuera las manifestaciones y protestas no han dejado de sucederse. Agricultores, hosteleros, profesores y padres, músicos y productores, conductores de autobuses... prácticamente todos los sectores de la sociedad han estado en pie de guerra por una causa o por otra.

De hecho, el año no comenzaba bien para el campo granadino y organizaban una macro tractorada el 19 de febrero en protesta por el futuro del sector agrario y ganadero. Entre 15.000 y 20.000 agricultores y ganaderos llegados desde toda la provincia de Granada, unos 750 en tractores, atravesaron la ciudad haciendo sonar sus cláxones con los que desde luego se hicieron escuchar.

Pero si esta manifestación nada tuvo que ver con el coronavirus, lo cierto es que el resto de las convocatorias de protesta que se han dado cita en nuestra ciudad han tenido el Covid-19 como trasfondo. Porque la situación económica derivada de la pandemia ha hecho balancearse los cimientos de sectores como los hosteleros, el ocio nocturno, los músicos o los conductores de autobuses que piden más ayudas para superar la crisis a la que tienen que hacer frente a partir de ahora.

Sin embargo, el curso político a nivel nacional ha seguido su curso, fuera del coronavirus, y durante estos meses se ha aprobado la 'Ley Celáa', algo que también ha tenido su repercusión en entre padres, madres y profesores de Granada.

Intervenciones policiales

Y, por último, el 2020 ha estado marcado por las detenciones, denuncias policiales y grandes operaciones antidroga. En este sentido, el coronavirus nos ha dejado en la ciudad casi 700 denuncias de la Policía Local de Granada a ciudadanos que se han saltado las restricciones impuestas por el Gobierno central durante el primer estado de alarma, y la Junta de Andalucía durante esta segunda ola del virus. Y aún quedan unos cuantos días para terminar el año.

Pero si en algo se caracterizará este año, en cuando a intervenciones policiales se refiere, es por la detención de conocidos delincuentes para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. 'El Banano' y Adonis han colmado titulares tanto a nivel local como nacional -y reproducciones de vídeo en las diferentes redes sociales- por lo particular de sus capturas.