Amplio dispositivo para velar por que se cumplan los cierres perimetrales en Granada

Un tsunami llamado Covid-19 está atacando a Granada en la última semana. El récord absoluto de contagios batido este domingo con 1.361 nuevos casos confirmados en solo 24 horas -a falta de que la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía haga público hacia el mediodía el parte de este lunes-, ha hecho que las autoridades sanitarias se replanteen las medidas restrictivas para frenar la expansión del coronavirus y, de paso, disminuir la presión asistencial en los hospitales, que se encuentran casi al límite.

En este sentido, el pasado viernes muchas comunidades autónomas, entre ellas Andalucía, ya emitieron un documento declarando un toque de queda entre las 23.00 y las 6.00 horas y el cierre perimetral de algunos territorios. En el caso de nuestra provincia, el de la capital y de 32 municipios, de los que no se podrá salir sin causa justificada o por una urgencia. También el Gobierno central decretó este domingo el estado de alarma como medida jurídica que ampare las decisiones tomadas por las autonomías respecto a las restricciones que consideran oportunas para frenar la expansión del virus.

Y a todo esto, los ayuntamientos de los municipios afectados, entre ellos el de Granada capital, también están poniendo todo de su parte para que la ciudadanía se conciencie de la necesidad de salvar vidas. De hecho, a partir de este lunes la Guardia Civil vigilará las carreteras de todo el área metropolitana y los agentes de la Policía Local de cada uno de los municipios harán lo propio dentro de sus localidades con el refuerzo de Policía Nacional y de los grupos especiales de este Cuerpo para situaciones de crisis, esto es de la Unidad de Intervención Policial y de la Unidad de Prevención y Reacción. En el caso de Granada capital, entre 97 y 214 agentes diarios trabajarán en estas tareas de vigilancia. De Policía Local, un grupo de UPR de 20 agentes, más los agentes del coche patrulla conocidos como 'zetas'.

La Guardia Civil, por su parte, mantendrá su dispositivo de agentes habitual con controles en los principales accesos al área metropolitana, a no ser que desde los municipios afectados se les solicite refuerzo para vigilar su territorio.

De esta manera, durante mínimo los próximos 15 días todo el cinturón metropolitano estará blindado por este dispositivo de seguridad para evitar que cualquier 'despistado' intente flanquear la frontera figurada de cada uno de los pueblos afectados por estas restricciones, ya que la Junta permite la circulación de personas residentes dentro de su ámbitos territoriales, siempre respetando las medidas de protección individual y colectiva establecidas por las autoridades sanitarias competentes. Es decir, que una persona de alguno de los 33 municipios afectados podrá moverse libremente dentro de esa localidad, pero no podrá salir de su pueblo a no ser que sea por una de las causas justificadas que marcan las autoridades.

Control de los transportes públicos

La vigilancia también se llevará a cabo para los pasajeros de los transportes públicos, esto es, para las líneas de autobuses urbanos -la línea 33 que llega hasta Cenes de la Vega o el N3 que lleva hasta el Cerrillo de Maracena- y metropolitanos que conectan la capital con alguno de los municipios de alrededor. También el metro, que une Albolote, Maracena y Armilla con Granada capital, sufrirá estos controles aleatorios de los agentes de la Policía Local que podrán identificar a partir de este lunes a los pasajeros y requerirles la documentación donde se justifique la movilidad.

En este caso, el Ayuntamiento de Granada ha avanzado que en el caso de las líneas urbanas -cuyo servicio finaliza a las 23.30 horas- no habrá modificaciones de horario para facilitar el transporte a aquellos trabajadores de los servicios esenciales que no están obligados a cumplir el toque de queda. También el Metropolitano de Granada, por su parte, ha anunciado que la línea 1 seguirá funcionando con normalidad, al menos, hasta que el toque de queda se publique en el BOJA.