Andalucía amplía su protocolo de hepatitis C

Más de 500 personas reciben los nuevos fármacos en centros sanitarios públicos que contarán con el nuevo documento a partir del lunes

María José Sánchez Rubio
La consejera de Sanidad, María José Sánchez Rubio
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La Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales ha ampliado su protocolo para el abordaje de la hepatitis C que aumenta la prescripción de los nuevos tratamientos disponibles y con el que se llegará a más del 40 por ciento de los enfermos andaluces. Los centros sanitarios públicos contarán con el nuevo documento a partir del lunes.

Concretamente, podrán beneficiarse de ellos los pacientes que estén a la espera de ser trasplantados de hígado, aquellos trasplantados que se han reinfectado nuevamente, los pacientes con cirrosis, los que tienen enfermedad extrahepática grave --manifestaciones de la enfermedad en otras partes del organismo diferentes al hígado--, los pacientes trasplantados de cualquier otro órgano, los que no han respondido a triple terapia y los que se encuentren en un estado previo a la cirrosis hepática --denominados clínicamente como F3--.

Además, el protocolo recoge que en el caso de pacientes F2 --fibrosis leve del hígado-- el médico valorará de forma individualizada, en base a diferentes signos clínicos y opciones terapéuticas disponibles, la pauta a seguir con estas personas.

La consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, ha apuntado que, con esta medida, "Andalucía amplía el número de pacientes a los que se les pueden prescribir los nuevos tratamientos, primando siempre el criterio clínico".

Hasta ahora, el protocolo nacional establecía la terapia con los nuevos fármacos sólo para los tres primeros casos --pacientes a la espera de ser trasplantados de hígado o trasplantados que se han reinfectado, que tienen enfermedad extrahepática grave y pacientes con cirrosis o en grado F4 de la enfermedad--.

De ese modo, Sánchez Rubio señala que "en Andalucía, ha decidido actuar y ampliar el número de pacientes a los que se le va a prescribir los nuevos tratamientos frente a los retrasos del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, que ha incumplido el plazo comprometido para presentar la Estrategia Nacional", una ampliación que "va a coincidir con la aprobación por parte del Gobierno de España del plan estratégico en materia de hepatitis".

Según la consejera, el protocolo específico para el abordaje de hepatitis C en Andalucía ha sido definido por amplio grupo de expertos --formado por especialistas en hepatología, en enfermedades infecciosas, farmacólogos, farmacéuticos y técnicos evaluadores-- y ha estado coordinado por la Agencia de Evaluación de Tecnologías Sanitarias (Aetsa).

Además, indica que dicho protocolo será actualizado de forma permanente en función de los nuevos fármacos que vayan apareciendo en el mercado para seguir garantizando la accesibilidad y la equidad en la sanidad pública andaluza.

Asimismo, la consejera asegura que desde comienzos de año, se han tratado en Andalucía 1.200 pacientes, de los que más de 500 se han beneficiado de los nuevos fármacos contra la hepatitis C. "Con esta novedad damos un paso importante a la posibilidad de hacer uso de estos fármacos en la fase previa a haber desarrollado una cirrosis hepática", destaca Sánchez Rubio.

Por su parte, el director de la Unidad de Enfermedades Digestivas del Hospital Universitario de Valme en Sevilla, Manuel Romero --también presente en la rueda de prensa-- aclara que "en las personas en las que la fibrosis no existe --F0 o F1-- la mayoría de las guías europeas no recomienda tratamiento", y, por tanto, "tienen indicación de tratamiento los pacientes cirróticos, se amplía el tratamiento a los F3 y en el caso de los F2, de manera individualizada porque es un grupo que necesita tratamiento", pero en este momento "tenemos que tener en cuenta las limitaciones de los recursos". "Podemos llegar a la mayoría de los pacientes pero de manera ordenada", añade.

LA PREVALENCIA ESTÁ EN TORNO A UN 1% DE LOS ANDALUCES

Al respecto, Romero precisa que "un 25 por ciento de los pacientes tendrían cirrosis, los F3 podrían ser sobre 15 por ciento y otro 20 por ciento tendrían F2, y nos quedaría otro 40 por ciento de pacientes con fibrosis leve o nula". Cuestionado sobre el número de afectados, este profesional apunta que "las cifras oscilan, pero un número razonable es una prevalencia del problema de la hepatitis C está en torno a un uno por ciento de la población, lo que serían 85.000 andaluces".

Sánchez Rubio resalta, asimismo, que el sistema de prescripción y dispensación electrónica de los tratamientos para la hepatitis C ya está funcionando en los hospitales públicos, al tiempo que recuerda que Andalucía "no aplica el copago" en el ámbito de la farmacia hospitalaria y "pide al Ministerio que lo retire". Un modelo novedoso a nivel europeo que "permitirá obtener en tiempo real, la información sobre los pacientes en tratamiento", así como poder llevar a cabo "un seguimiento y evaluación de la eficacia real de los nuevos tratamientos, así como de sus efectos adversos".

Este modelo electrónico permitirá, además, conocer el volumen de pacientes que hay en la comunidad autónoma con los diferentes grados de enfermedad.

PIDE QUE LA RECAUDACIÓN DEL IVA SE DESTINE A ESTOS TRATAMIENTOS

Del mismo modo, la consejera recordado que "Andalucía continuará exigiendo al Gobierno central transparencia absoluta en la información sanitaria sobre fármacos y tecnologías para evitar la contaminación informativa por parte de la industria farmacéutica", así como la existencia de una fondo específico para "apoyar" a las comunidades autónomas. Sobre si la estrategia nacional plantea la compra centralizada de estos tratamientos, la consejera señala que "en principio no".

Asimismo, ha reiterado que el coste fiscal de la subida del IVA sanitario al 21% "se traduzca en bienestar de los ciudadanos y se destine a los tratamientos innovadores". En este sentido, explica que el "IVA es una carga más no solo para las personas sino también para las comunidades autónomas" y que "según sus cálculos, la subida del IVA podrá suponer de incremento en gasto para el servicio andaluz de salud de unos 60 millones de euros en 2015", que "nos vendrían muy bien para la financiación de estas terapias".