Andalucía reafirma su objetivo de que el 70% de la población esté vacunada en agosto pese a la reducción de dosis

El consejero de la Presidencia, Administración Pública e Interior y portavoz del Gobierno andaluz, Elías Bendodo, ha expresado este miércoles su convencimiento de que el "70 por ciento" de la población andaluza estará vacunada frente al Covid-19 "antes de que acabe el mes de agosto".

"Estoy convencido de que sí", ha respondido el consejero portavoz, en una entrevista en la Cadena Ser, recogida por Europa Press, a la pregunta de si se alcanzará el 70 por ciento de la población inmunizada antes de que acabe agosto en Andalucía.

Además, Elías Bendodo ha reiterado que desde la Junta están "trabajando en una estrategia" para "empezar a ponerles la primera dosis" de la vacuna "a los menores entre 12 y 16 años" de edad "entre la tercera y cuarta semana de agosto, para que puedan llegar a la vuelta al colegio con las dos dosis" puestas.

Ha puntualizado que "esa es nuestra planificación", pero "va a depender, evidentemente, de la llegada de dosis", y al respecto ha vuelto a lamentar la reducción de las que está recibiendo Andalucía en las últimas semanas por parte del Gobierno central, al que ha vuelto a reclamar que "se plante ante la Unión Europea y las farmacéuticas" para exigir la llegada de más dosis.

Bendodo ha subrayado que "estamos al final del camino", y de recibir alrededor de 830.000 dosis hace dos semanas en Andalucía se ha pasado a poco más de 400.000 en ésta, una reducción que, según ha advertido, es "un gran problema que tiene que resolver el Gobierno", para el que debe ser una "prioridad" lograr una "multiplicación de la llegada de dosis".

Con todo, ha confirmado que la Junta mantiene los plazos establecidos para poner las segundas dosis a quienes han recibido las primeras, si bien "se ralentizará" la apertura de la vacunación a nuevos tramos de edad, aunque el Gobierno andaluz también persiste en su objetivo de que, "en los días que quedan de julio, todas las personas mayores de 20 años tengan puesta al menos una dosis" de la vacuna, según ha confirmado Bendodo.

El portavoz ha considerado "una mala noticia" que se produzca una "paralización" en el ritmo de vacunación "al final de la campaña" y "coincidiendo con la eclosión y la explosión de la variante Delta, lo que está multiplicando los contagios".

Multiplicación de hospitalizaciones

Por otro lado, sobre la evolución de la pandemia, el consejero ha señalado que a la Junta le "preocupa que, lo que semanas atrás no se traducía en ingresos hospitalarios", ahora los contagios sí están provocando una "multiplicación" de hospitalizaciones, con hasta 878 pacientes con Covid a fecha de este miércoles en Andalucía, una "cifra bastante alta en comparación con la semana pasada", según ha apuntado.

Con todo, ha señalado que el número de ingresos hospitalarios que se está registrando en comparación con el de los contagios son muchos menos que los que se producían en anteriores oleadas de la pandemia, "porque la vacunación está funcionando" y las personas que se están contagiando, en su mayoría, son "más jóvenes y resistentes, y afrontan mejor el virus".

Toques de queda

Por otro lado, sobre la decisión adoptada este martes por la Junta tras la reunión del Comité de Expertos que le asesora en la pandemia de solicitar al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) el 'toque de queda' entre las 2,00 horas de la madrugada y las 7,00 horas de la mañana en municipios que superen la incidencia de 1.000 casos por 100.000 habitantes en 14 días y que tengan una población superior a 5.000 vecinos, Bendodo ha comentado que ahora mismo sólo hay cuatro localidades andaluzas en esa situación.

Este jueves "se actualizarán esos datos" y, en función de los mismos y de la revisión de los comités territoriales de alerta de salud pública, se solicitarán los 'toques de queda' en los municipios con las citadas condiciones, según ha confirmado Bendodo.

Finalmente, el consejero portavoz ha vuelto a criticar la "precipitación" del Gobierno central a la hora de acordar la retirada de la obligatoriedad del uso de las mascarillas en espacios exteriores si se guardan unas distancias mínimas interpersonales de seguridad.