Un año para recordar, lleno de dudas, de incertezas, de falta de seguridad y de muchos sabelotodo

Estamos viviendo un tiempo de pandemia y de dudas, de no certezas, de no saber, de no estar seguro…. ante los sabelotodo. Y nos encontramos con la arrogancia de las personas que se lo saben todo en tiempos de pandemia.

La ventaja de ser honesto es que hay muy poca competencia. Decía Virginio Gallardo que en esto de ser honesto hay poca competencia, muy poca diría yo. La honestidad es tener el coraje de decir la verdad cuando sería más cómodo estar callado. La autenticidad es una característica que a veces no es fácil de encontrar en una persona, en un mundo en el que reinan las apariencias.

A ello, le podemos añadir la necesidad de ser amable en tiempos de pandemia. La amabilidad genera amabilidad también en tiempos de Covid-19. Ser sensible en tiempos de pandemia para poder percibir los matices. La sensibilidad y la fragilidad son dos atributos humanos de los que nadie está exento. Y en estos momentos tan duros y difíciles probablemente más, donde los rebrotes en centros sociosanitarios, entornos sociales, mataderos y agrupaciones de temporeros, nos ha marcado aún más la necesidad de más higiene de MANOS + Mascarilla + distancia en METROS. Y todo ello en España con muertes evitadas y pocas PCRs hechas en Andalucía. NADIE está a SALVO de esta PANDEMIA: la mejor vacuna es mayor higiene de manos, autolimitar los contactos y quedarse en casa.

Creo que NO se debe valorar tanto el éxito como la pasión y el reto. La ética, el compromiso o la confianza son valores que se generan en el día a día. Todo ello dedicado a los que creen que nunca se equivocan, altivos, mediocres, ostentosos e intolerantes que gestionan la pandemia. Decir públicamente que te equivocaste, que has cambiado de opinión o que ahora piensas diferente exige fortaleza y autoestima. Pedir ayuda, un acto de valentía, de honestidad y humildad.

Y es que cuando pedimos ayuda también estamos dando un voto de confianza a la otra persona, rompiendo así con los prejuicios que tenemos. Talento y h-alma son imprescindibles para dar la espalda al miedo y que aparezca la confianza en tiempos de pandemia.

Es importante entender que la paciencia es poder, que la prisa no implica rapidez y que a menudo avanzar despacio es la forma de llegar antes. Y NO contagiemos el miedo. Ni asentir sin SENTIR. Porque quien tiene Magia, no necesita trucos. Por tanto es importante RESISTIR ante las maniobras (orquestadas) en la oscuridad.

La pandemia ha acelerado la necesidad de modelos de liderazgo transversales y abiertos. Yo más diría: un Liderazgo femenino que es más necesario que nunca en tiempos Covid-19. Ser un buen líder no es fácil y menos en tiempos de pandemia. La falta de liderazgo es el motivo por el que se ha llegado a la situación de la pandemia en España. Los líderes deben tender puentes, propiciar consensos e integrar a personas y grupos diferentes en pos de un objetivo común. El poder de la influencia para entender mejor el liderazgo en tiempos de pandemia. Necesitamos líderes al servicio del equipo, líderes auténticos que rompan con la mediocridad, líderes que NO estén entrenados en criticar y SI en reconocer, también en tiempos de #covid19. Ser buen directivo con la sabiduría de la humildad para hacer las cosas lo mejor posible. Y es que hay más de 10 motivos por los que no me gusta mi jefa.

A pesar de la situación en la que estamos, necesitamos y queremos líderes con sonrisa. Sonreír, sin duda alguna, es básico. Un líder cercano es alguien que tiene bienestar y lo genera porque quiere lo mejor para su gente. El liderazgo y el aprecio. El secreto del liderazgo se basa en algo tan sencillo y tan importante al mismo tiempo como el aprecio. Y Más AFECTO: Mientras que las palabras de odio pueden destrozar el alma, las palabras cariñosas, que vienen del mundo de los afectos, pueden curar las heridas más profundas. Nada proporciona más energía a otra persona que sentirse apreciado. Y en ese entorno, vemos que los trabajadores de mi organización han dado lecciones a los “jefes” también en tiempos de la pandemia.

Para crecer, es importante:

1. Esforzarse un poco cada día. El esfuerzo, el trabajo y la constancia son los únicos secretos que se esconden tras el éxito.
2. Si alguien es capaz de soñar con algo, puede lograr alcanzarlo.
3. La confianza en uno mismo es el camino hacia el éxito y la felicidad.
4. Puede una persona avanzar despacio, lo importante es no pararse nunca.
5. Para ganar, uno primero tiene que empezar.
6. Si las cosas no cambian, uno tiene que intentar cambiar su forma de verlas.
7. Creer en las propias posibilidades.
8. No escuchar los consejos de aquellos que no luchan por cumplir sus sueños, ni permitir que le digan a uno que no podrá alcanzar los suyos.
9. Si de verdad uno quiere lograr el éxito, dejar de pensar en cómo hacerlo y dar el primer paso.
10. Solo las personas optimistas consiguen alcanzar el éxito. El pesimista ve las oportunidades como una dificultad.
11. Por tanto reconocer el error es el primer paro para crecer.
12. No hacer nada implica alimentar los propios miedos. Solo cuando uno se pone en marcha los supera.
13. Aprender es un propósito que siempre hay que tener.
14. Centrarse en cambiar a uno mismo y no derrochar energía intentando cambiar a los demás.
15. El éxito implica haber fracasado antes en tu vida. Superar los fracasos es la forma de alcanzar el éxito.

Ante todo ello, esperemos que lo que venga no sea peor: seamos solidarios. Y lo digo en un entorno donde necesitaremos mejor información para parar el virus y muchos más abrazos para mejorar nuestra salud.