Asogra exige derechos de accesibilidad para personas sordas en centros sanitarios
La organización denuncia las "deficiencias" que genera el contar sólo con una intérprete de lengua de signos para cubrir los servicios ordinarios
Gabinete
Este sábado, la Agrupación de Personas Sordas de Granada (Asogra) se manifestó por las calles de la ciudad para exigir el reconocimiento y garantía de los derechos de las personas sordas, en especial su derecho a la accesibilidad en el sistema sanitario. La protesta, que reunió a cientos de personas, fue una llamada de atención sobre la falta de intérpretes de Lengua de Signos que impide el acceso adecuado a los servicios de salud.
Actualmente, en la provincia de Granada hay más de 17.500 personas sordas, pero sólo se cuenta con una intérprete de lengua de signos para cubrir los servicios ordinarios de este colectivo, lo que genera graves deficiencias en la atención sanitaria. Esta situación supone un riesgo para la salud de las personas sordas, que no pueden comunicarse de manera efectiva con el personal sanitario, vulnerando así su derecho a una atención de calidad, equitativa y accesible.
Durante la manifestación, se hicieron reivindicaciones claras: más intérpretes de Lengua de Signos, accesibilidad plena en todos los ámbitos de la vida pública y, en especial, en el sector sanitario. Asogra denunció la discriminación a la que se ven sometidas las personas sordas debido a la falta de recursos humanos y de políticas efectivas que garanticen su inclusión.
El colectivo de Personas Sordas subrayó la necesidad de medidas urgentes y eficaces por parte de las autoridades sanitarias y administrativas para garantizar la igualdad de derechos. Asogra recordó que la accesibilidad no es un privilegio, sino una obligación legal y moral, y que el derecho a la salud debe ser accesible para todas las personas, sin importar sus capacidades auditivas.
La Agrupación de Personas Sordas de Granada seguirá luchando hasta que se garanticen los servicios de interpretación y la plena inclusión de las personas sordas en la sociedad. "No pedimos más, pedimos lo justo: el derecho a vivir en igualdad y con dignidad", subrayó David Morillo, el presidente de Asogra.
