Avanzan los trabajos de recuperación del mosaico de la Villa de Salar, donde se excavará hasta 2023
Los arqueólogos trabajan en la recuperación de un mosaico y esperan descubrir una imagen del que fue dueño de la finca
El equipo de arqueólogos que trabaja en la cuarta campaña de excavaciones en la Villa Romana de Salar, en el Poniente de Granada, que finaliza el 30 de agosto, prosigue la recuperación del mosaico con escenas de cacería hallado el año pasado, en que en estos días se espera descubrir la figura del 'dominum' o dueño de la finca, al modo de un "héroe griego" atacando al jabalí del que ya hay indicios en la representación. Está previsto que las excavaciones se prolonguen al menos hasta el año 2023.
Así lo ha explicado a Europa Press el arqueólogo de la Universidad de Granada y director de los trabajos, Julio Román, quien ha explicado que, con un presupuesto de unos 30.000 euros aportados por el Ayuntamiento de Salar, las tareas se han basado en un sondeo de seis por cuatro metros, y en sacar estructuras del peristilo o conjunto de columnas que rodeaba el patio central de la Villa Romana, en la zona del pasillo occidental.
Este yacimiento está considerado como uno de los que más potencialidad tienen en el territorio nacional. Los expertos, entre ellos voluntarios que colaboran cada jornada en el marco de la iniciativa 'Arqueólogo por un día', trabajan también en estructuras del vestíbulo monumental de entrada a la Villa, desde el que el visitante podía divisar el poder de quien era el dueño de esta finca de Salar, reflejado en ese "gran mosaico que va a aparecer en este pasillo".
Una de las estancias que se están excavando este mes de agosto correspondería a un área de baño privado del 'dominum', en un área situada al sur del yacimiento, ha indicado Román, que ha explicado que estas estructuras se corresponden con la "monumentalización" que se produce en el siglo III sobre la base de una Villa más rústica, que tiene su origen dos centurias antes.
La familia propietaria la habría abandonado, en una práctica que era habitual en época romana, en torno a la mitad del siglo V, y luego es reocupada por "poblaciones campesinas que trabajaban" en la zona para "reaprovechar" materiales o espacios, con "estructuras muy domésticas, sobre los propios mosaicos".
Esta fase tardía de la Villa también se ha documentado este verano, ha proseguido Román, con la aparición de restos de un horno, o un molino, sobre la estructura ya derrumbada de la época de esplendor.
El proyecto general de investigación aprobado por la Junta de Andalucía para el periodo 2019-2023, en el cual se encuadran ya los trabajos de este verano, implica un compromiso económico anual del Ayuntamiento por unos 150.000 euros, además de subvenciones de otras administraciones que se podrían sumar como vías de financiación.
Las excavaciones han contado con un programa de puertas abiertas en el marco del cual unas 170 personas han conocido este mes de agosto, guiadas por el grupo de arqueólogos, los trabajos allí desarrollados, a las que hay que sumar las que han accedido en el marco de las visitas que organiza durante todo el año el Ayuntamiento, que trabaja para que este yacimiento sea el motor de desarrollo socioeconómico del pueblo, de unos 2.700 habitantes.
En septiembre, ya sin los arqueólogos, los restauradores harán un trabajo de consolidación y de limpieza para las visitas que se vayan a recibir durante el año. El alcalde de Salar, Armando Moya, manifestó a Europa Press, antes del inicio de los trabajos de este verano, su confianza en que el yacimiento contribuirá a aumentar el "reclamo turístico" que supone para el pueblo su pasado arqueológico e histórico romano.
Los trabajos arqueológicos en este pueblo del Poniente de Granada dieron el verano pasado con una Venus Púdica que el Ayuntamiento confía se pueda quedar en el municipio para su exposición definitiva, una vez que sea restaurada.