El Ayuntamiento piensa en medidas "más drásticas" para sellar las cuevas de San Miguel
El Ayuntamiento de Granada ha considerado este martes que debe aplicarse un procedimiento "algo más drástico" para evitar que las cuevas del cerro de San Miguel, que fueron desalojadas y selladas la semana pasada, vuelvan a ser reabiertas, abogando por usar hormigón para el cerramiento de estos espacios.
La concejal de Urbanismo, Isabel Nieto (PP), ha opinado que el procedimiento usado la semana pasada para cerrar las cuevas, que consistió en la "aportación de tierra para recuperar la ladera", no ha sido "efectivo", después de que los desalojados se hayan desplazado al lugar con herramientas para reabrirlas con el objetivo de volver a habitarlas.
A preguntas de los periodistas sobre las medidas que tomará el Ayuntamiento ante esta circunstancia, Nieto ha matizado que la entidad local debe seguir los procedimientos establecidos por la ley, dando cuenta a la Delegación de Cultura de la Junta en Granada de la actuaciones acometidas hasta la fecha y de los resultados.
Así, cualquier nueva intervención que quiera hacer el Ayuntamiento deberá ser trasladada a Cultura y contar con su visto bueno, dado que se trata de una zona protegida desde el punto de vista paisajístico, patrimonial y arqueológico. De lo contrario, ha dicho, la entidad local puede ser objeto de sanciones y responsable de delitos de prevaricación por actuar en la zona "sin permiso" de la Junta.
La edil ha subrayado que se trata de la segunda vez que se interviene en el cerro para tratar de sellar las cuevas y hasta la fecha han sido reabiertas por sus moradores. A su entender esto "demuestra" que estos procedimientos no son efectivos y por tanto "habrá que proponer" medidas "algo más drásticas" que impidan la reapertura de estos espacios, aludiendo a la posibilidad de usar hormigón para sellarlos.
"Si luego nos encontramos con que hay nuevos ocupas tendremos que acudir a la vía judicial para que lo autorice, pero no podemos entrar allí sin los procedimientos cumplidos", ha reiterado la edil, quien pese a todo a ello ha mantenido que desde el Ayuntamiento "no se quedarán quietos" ante la reapertura de las cuevas porque es el responsable en caso de que se produzca alguna "desgracia".
En este sentido, ha insistido en que las cuevas, "que no han surgido de forma natural en el terreno" ni han sido ejecutadas por profesionales, están declaradas en ruina y se asientan sobre un terreno "blando", lo que ha propiciado que algunas se hayan "hundido".