El Ayuntamiento de Armilla destina 373.000 euros a los afectados por el Covid-19
Entre los beneficiarios de las medidas adoptadas se encuentran el Banco de Alimentos y la Atención de Mujeres víctimas de violencia de género
El Ayuntamiento de Armilla destina un total de 373.000 euros a los afectados de la COVID-19. En el marco del Plan Local de Recuperación Económica y Social de Armilla se refuerzan los apoyos a las políticas sociales con una dotación económica que ascienden a 270.000 euros, además de las subvenciones de otras administraciones, que ascienden a 103.000 euros.
Para ello, el consistorio ha realizado una modificación presupuestaria para incrementar el crédito destinado a Servicios Sociales. “Se trata de tomar medidas de protección social de las personas y colectivos más desfavorecidos”, señala la alcaldesa, Loli Cañavate que añade que “el total de la modificación presupuestaria asciende a unos 150.000 euros”. Por lo tanto, consiste en “dar continuidad a la ayuda social que el Ayuntamiento viene prestando para paliar los efectos de la crisis social y económica”.
Además, Cañavete ha manifestado que “seguiremos trabajando activamente para atender las necesidades, especialmente de quienes peor lo están pasando. Para ello, el Ayuntamiento aporta también los 120.000 euros del Programa Municipal de Apoyo a las Familias”.
La edil de Servicios Sociales, Mercedes López Fonseca recuerda que “además de la crisis sanitaria, la crisis social y económica ha generado pérdida de actividad, aumento del desempleo y nuevas necesidades sociales y se está dando respuesta a todas las familias y personas vulnerables".
Medidas
Así, la concejala detalla algunas de las medidas adoptadas entre las que se encuentra las partidas que reforzarán las ayudas a las familias más vulnerables; así como del Banco de Alimentos y a la Atención de Mujeres víctimas de violencia de género. Por otro lado, señala que “se ha tenido en cuenta las partidas destinadas a ayudas al alquiler; subvención de ayudas a los suministros básicos de agua y luz de seis meses; seguimientos individualizado de todas las personas con riesgo de exclusión social”.
Entre las medidas se encuentra también realizar un seguimiento individualizado de todas las personas con riesgo de exclusión social con especial atención a las personas mayores. Para ello, se seguirá trabajando y colaborando con la red de voluntariado en su trabajo con los mayores y las personas con movilidad reducida.