"Lo de Facebook no fue un error, hicieron algún cambio que no salió bien"

La tarde-noche del lunes será recordada por muchos granadinos como el día en el que "se les quedó 'pillao' el Facebook". La caída de los servicios de la red social presidida por Mark Zuckerberg afectó, lógicamente, a sus otras dos marcas: WhatsApp e Instagram. En los tiempos que corren, estar seis horas y media sin ninguna de estas tres redes puede acabar con la paciencia de más de uno y, habida cuenta de que no es la primera vez que sucede aunque jamás durante tanto tiempo, mucha gente se pregunta cuándo puede volver a repetirse.

GranadaDigital ha querido conocer de primera mano las causas que han podido llevar a una empresa de la envergadura de Facebook a sufrir una caída de dicha magnitud. Por eso se ha puesto en contacto con Trevenque, uno de los principales proveedores de servicios de informática y programación de la provincia. Rafael Ortiz, técnico de Sistemas del Cloud Center Andalucía –del que forma parte la empresa granadina–, abunda en los posibles motivos de la caída generalizada y responde a algunos de las preguntas que todo el mundo se hace.

Tal y como han aportado muchos expertos, la raíz del problema podría haber estado en los servidores DNS (sistema de nombres de dominio, según su traducción al español), que no son más que "servidores que asocian el nombre de una dirección de dominio a una IP, que es como se comunican las máquinas. Y éstas, al no saber a qué dirección IP correspondía no eran capaces de acceder al sitio", desentraña Ortiz, quien achaca a "un cambio en el BGP (protocolo de puerta de enlace de frontera, en español)" el hecho de que el intercambio de información no fuera el correcto. En 'román paladino', dicho protocolo no es más que un enrutamiento, o búsqueda de caminos de entre todos los posibles de una red.

Aun así, cuesta entender que algo tan 'relativamente cotidiano' para millones de proveedores y servicios web mucho más humildes le haya generado un contratiempo tan importante a Facebook, lo que ha abonado el terreno de las teorías de la conspiración. ¿Pudo tratarse de un sabotaje interno? Ortiz no lo descarta, aunque tampoco pone la mano en el fuego: "Parece que no fue un error de hardware o de la infraestructura. Hicieron algún cambio que no salió bien. Si fue adrede, un despiste o algo que se les escapó de las manos no lo sabremos nunca". Otra de las cuestiones que ha provocado la reacción de las redes sociales radica en la necesidad de acudir a los cuarteles generales de la compañía para restablecer el sistema manualmente.

Un hecho sorprendente para un gigante de lo digital. Pero mucho más lo es si se tiene en cuenta que los empleados tuvieron problemas para acceder a estos búnkeres por los propios protocolos digitales que gobiernan sus infraestructuras de seguridad. Rafael Ortiz arroja luz: "A nivel de BGP, si el cambio hace que no se llegue correctamente hacia los sitios, puede provocar que no seas capaz de alcanzar alguno de los sistemas en remoto".

¿Habrá más caídas?

Una de las cuestiones que más preocupan a los usuarios es si pueden producirse más caídas de este calibre en las próximas horas. No en vano, no es la primera vez que los servicios de WhatsApp, Facebook e Instagram sufren un desplome, aunque nunca durante tanto tiempo como este lunes. Por eso, el informático explica que "ha habido otras caídas, aunque en esos casos estaban relacionadas con el CDN (red de distribución de contenidos)". "Ese destino remoto ha fallado otras veces, provocando que fallaran algunas de las aplicaciones", y de ahí que no desembocaran el 'caos' de la última jornada. Así, no parece tan fácil que se repita más adelante un hecho similar, aunque tampoco puede descartarse.

El experto tira de su propia experiencia en Trevenque para hablar de posibles incidencias similares en empresas más pequeñas como en la que él se desempeña. "Hasta ahora no hemos tenido un hecho similar, pero es algo que puede ocurrir. Lo que pasa es que en una empresa tan gorda como Facebook utilizan otros protocolos diferentes que pueden hacer que te quedes fuera", advierte. Para Rafael Ortiz, el fallo del DNS, con el consecuente perjuicio para miles de personas, no debe ser un problema para la empresa más allá del dinero que ha perdido en los mercados bursátiles –"creo que, en un momento, dado más les puede afectar las filtraciones realizadas últimamente", vaticina–, pues "el usuario que es de Facebook es de Facebook siempre. No cambia por algo así. E igual con WhatsApp e Instagram".

No debe producirse, por tanto, una excesiva migración de usuarios de WhatsApp a Telegram, por ejemplo, pese a que el servicio de mensajería instantánea ruso fue el gran beneficiado de la jornada de este lunes. Los defensores de esta última red suelen alegar que WhatsApp siempre va a la zaga en lo que a implementación de novedades en la aplicación se refiere y, sobre todo, que no sufre caídas. Ortiz, sin embargo, desmitifica esta última 'romantización' de la red social cuyo logotipo es un avión de papel blanco sobre fondo azul: "La magnitud del nivel de usuarios e infraestructuras no es comparable".