Caparrós marca su territorio
Manuel Iturra es uno de los mejores pivotes de la Liga española. El chileno es un jugador indispensable para el Granada. Llegó la pasada temporada y desde el minuto uno se puso el peto de titular para no soltarlo hasta el último encuentro en Zorrilla, donde los andaluces lograron la permanencia. Sin embargo, Lucas perdía años de vida en cada uno de los partidos que Iturra veía amarilla. El ex del Málaga no entiende otro modo de competir que ir al límite, con todo lo bueno que ello conlleva, pero, también, esa manera de jugar le ha costado muy cara en algunos partidos en forma de expulsión. Hasta trece cartulinas vio el sudamericano durante la pasada temporada y en tres ocasiones dejó al conjunto nazarí con diez, y gracias. En varios partidos más Iturra no se fue antes de tiempo a la ducha porque el trencilla de turno le perdonó la segunda amarilla y porque el bueno de Alcaraz evitaba ipsofacto jugar con fuego sacándole del campo por un compañero. Con Caparrós, «viejo zorro» de nuestro fútbol, solo han hecho falta dos jornadas para que el utrerano haya puestos los puntos sobre la íes.
Ayer, ante el Elche, Iturra estuvo muy cerca de ver su primera roja de la temporada y solo la benevolencia de Iglesias Villanueva evitó segunda cartulina y, consecuentemente, la expulsión. Nada más producirse la acción, Caparrós lo mando al banquillo y colocó a Yuste en su lugar provocando el enfado del chileno que le negó al técnico rojiblanco el saludo tras la sustitución. Más tarde, Iturra recapacitó y publicó en su perfil de twitter el siguiente mensaje en modo de disculpa: “Hola solo aclarar que no salí molesto por el cambio. Está muy bien hecho. Ya estaba al límite. Molesto por una situación puntual». Caparrós ya ha marcado, y con acierto, su territorio. Cuatro de seis puntos en las dos primeras jornadas: el mejor comienzo del Granada desde su regreso a Primera hace ya cuatro temporadas.