Casi un centenar de autobuses cortan el centro de Granada en protesta por la ausencia de ayudas para el sector
Es una manifestación que se ha convocado en más de una veintena de ciudades españolas por la Asociación de Empresas de Transporte de Viajeros por Carretera (Direbús)
A las 11 de la mañana se daban cita casi un centenar de autobuses en el recinto ferial de Almanjáyar. Era el punto de partida de una manifestación que ha recorrido las principales calles del centro de la ciudad. Los dueños y conductores de estos vehículos han querido protestar así este miércoles por la ausencia de ayudas para el sector tras la crisis económica derivada por la pandemia del coronavirus.
No están solos. Con el lema #Salvarelautocar, más de 2.000 conductores de autobús de veinte ciudades españolas se han sumado a esta convocatoria de la Asociación de Empresas de Transporte de Viajeros por Carretera (Direbús), desde donde consideran que dentro del paquete de soluciones puestas en marcha por el Gobierno para el sector del transporte "se han olvidado del transporte discrecional y turístico de viajeros".
Antonio Campoy es uno de los afectados. Tiene cuatro coches y de él dependen siete familias. Su empresa se dedica principalmente a las rutas nacionales para turistas asiáticos. Sus vehículos son "de lujo" y en ellos se ha gastado "mínimo 250.000 euros por autocar" para reformarlos y adaptarlos a las nuevas normativas de seguridad y comodidad vigentes cada año. Debido a las restricciones ocasionadas por la pandemia del Covid-19, no ha generado ingresos durante los últimos tres meses, por lo que ha tenido que recurrir a los ERTES para sus trabajadores, que aún no sabe cuándo podrán volver a trabajar.
"El Gobierno se ha olvidado de nosotros. No nos ha incluido en el paquete de ayudas que ha puesto en marcha para el colectivo, porque sólo se han centrado en las líneas regulares, pero ¿qué pasa con el transporte discrecional de colegios, del traslado de deportistas o de servicios turísticos?", pregunta Antonio, quien asegura que "no tenemos un protocolo de mantenimiento ni de higiene, y seguimos sin tener la posibilidad de flexibilizar las incorporaciones de los ERTES".
Para los autobuseros, la crisis provocada por la pandemia del Covid-19 ha situado "al borde de la ruina más absoluta y sin posibilidad de resurgir en varios meses" al colectivo y lamentan que desde el 10 de marzo no han podido facturar, porque de la noche a la mañana se han visto "sin turistas, con los colegios cerrados y sin saber cuándo van a volver". "El daño es tremendo", concluye Antonio.
Mediante esta manifestación, el colectivo intenta reclamar atención del Gobierno y le exige medidas concretas para resolver su situación. La comitiva ha salido desde Joaquina Eguaras, ha bajado por Doctor Olóriz, para recorrer Gran Vía, Reyes Católicos y Acera del Darro, y subir hasta la Carretera de la Sierra, desde donde cada autobús regresará hasta la cochera donde ha permanecido encerrado los últimos 90 días y de donde no sabe cuándo va a volver a salir.