Cerrados diez pisos de alterne en la provincia de Granada detectados durante el confinamiento
La Policía Nacional ha procedido a su cierra para evitar la explotación sexual de mujeres
La Policía Nacional ha cerrado en Granada capital y otras localidades de la provincia diez pisos de alterne para evitar la explotación sexual de mujeres, después de haber detectado estos negocios durante el estado de alarma.
Según relata el cuerpo policial en una nota de prensa, a su Unidad Contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (Ucrif) de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras le corresponde la investigación de actividades delictivas relacionadas con la trata de seres humanos, el tráfico de personas, la inmigración ilegal y las falsedades documentales sobre esta materia, así como los delitos conexos relacionados con la extranjería y el tráfico de personas.
Estos agentes llevan a cabo a diario labores de prevención e investigación a nivel nacional e internacional tanto de este tipo de acciones como de las personas implicadas, y en Granada han evidenciado el cierre de todos los clubs de la provincia y de la mayoría de pisos de prostitución de la capital y su área metropolitana desde el inicio de esta situación excepcional, orientándose las actuaciones al control de casas de citas en las que se realizan actividades que suponen el desplazamiento de usuarios de estos servicios.
De la misma manera se han llevado a cabo actuaciones de control, asesoramiento, información y entrevistas a las personas que desarrollan estas actividades, por si fueran víctimas de trata de seres humanos o de prostitución forzada, conforme a los protocolos de trata establecidos, haciéndoles partícipes de los distintos recursos policiales, sociales y asistenciales existentes para este tipo de víctimas.
La Policía resalta que estos controles han permitido la detección de diez nuevos pisos en los que se desarrollan estas acciones de los que los agentes no tenían conocimiento previo y que "han sido igualmente informados de la nueva situación".
"Por lo que respecta a los pisos en los que se continúan prestando servicios sexuales y que suponen una incitación a contravenir las medidas de confinamiento, como la existencia de focos de contagio del virus, se van a adoptar medidas más severas de control y propuesta para sanción administrativa o investigación penal, conforme a la legislación vigente en la situación actual", subraya la Policía.
Esta operación se enmarca dentro del Plan de la Policía Nacional contra la Trata de Seres Humanos con Fines de Explotación Sexual, puesto en marcha en 2013, y que dio lugar a la creación de una nueva unidad de referencia en esta materia: la Brigada Central contra la Trata de Seres Humanos, adscrita a la Comisaría General de Extranjería y Fronteras de la Policía Nacional.