Cincuenta años del debut de Cruyff como azulgrana ante el Granada

El periodista Ramón Ramos rememora con GranadaDigital aquella histórica tarde de la que este sábado se cumple medio siglo

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Alineación del Granada CF en el partido frente al FC Barcelona que supuso el debut como azulgrana de Johan Cruyff, el 28 de octubre de 1973. De izquierda a derecha y de arriba abajo: Izcoa, Toni, Fernández, Falito, Jaén, Montero Castillo, Porta, Chirri, Quiles, Santi y Dueñas | Foto: Archivo GD
Miguel López Rivera
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Hace justo cincuenta años, el nombre del Granada CF entró inesperadamente a formar parte de la historia de quien fue, ha sido y sigue siendo uno de los mejores futbolistas de la historia; si bien, por aquel entonces, los Izcoa, Fernández, Porta y demás apenas se habían enterado unas horas antes de lo que aquella histórica tarde de domingo estaban a punto de vivir. De ahí el enfado lógico de Joseíto, el mítico entrenador zamorano que tanto en aquella temporada 73-74 como tres antes, en la 71-72, condujo al equipo rojiblanco hasta el sexto puesto de la tabla en Primera una vez concluida la Liga, en las que siguen siendo hasta la fecha las dos mejores clasificaciones históricas granadinistas. "No sabía que la Federación [Española] abría los sábados por la tarde. De haber sabido que jugaba Johan Cruyff habríamos ensayado toda la semana un sistema específico", se quejó amargamente el técnico ante los periodistas concentrados aquella misma tarde de domingo frente al Hotel Manila de Barcelona, tal y como recuperaba para Granada Hoy Ramón Ramos el 28 de octubre de 2003.

La intrahistoria del debut de 'El Flaco' con la camiseta del Barça la conoce como pocos el periodista granadino, que atiende la llamada de GranadaDigital en la víspera del día en el que se cumple medio siglo de su estreno como azulgrana frente al Granada en el Camp Nou. Su relato atestigua vívidamente esa máxima que convierte las anécdotas de un momento determinado en grandes y legendarias historias andando el tiempo. Y por eso, aunque entonces pudiera pasar desapercibido, aquella foto a pie de césped en el coliseo culé en la que figuran de pie Izcoa, Toni, Fernández, Falito, Jaén y Montero Castillo; y agachados Porta, Chirri, Quiles, Santi y Dueñas –la misma que encabeza esta pieza– es ya historia del fútbol español y mundial.

Porque Cruyff no sólo bordó un partidazo frente al Granada –que por acierto acabó con goleada del Barcelona por 4-0, con dos tantos del holandés incluidos–, sino que cambió para siempre, primero como jugador y más tarde desde el banquillo, la mentalidad del club catalán. "En aquel momento, el debut de Cruyff no se valoró con perspectiva histórica. Cayó como un mazazo en el vestuario del Granada CF el hecho de que le permitieran jugar. Aunque el Barcelona ya había pagado el pase del futbolista, por cuestiones burocráticas internas no estaba previsto que la Federación Holandesa le diera el transfer hasta el 1 de enero de 1974, pero para sorpresa de todos llegó aquel día. Inesperadamente, las oficinas de la Real Federación Española de Fútbol también abrieron un sábado por la tarde. Yo creo que es la única vez que lo han hecho. Pero el hecho, tal y como me dijo una vez Izcoa, es que al final ese partido ha quedado en la historia, aunque a nadie le guste que le metan cuatro goles", recuerda Ramos.

El periodista, autor de multitud de artículos para la colección y libros sobre la historia del Granada como por ejemplo Los Años del Pichichi rememora que tan inesperado era el debut de Cruyff que Rinuls Michels ya había elegido a Martí Filosia para vestirse de corto ante los de Joseíto. Y a la fatídica circunstancia para los intereses del Granada de que el transfer entrara a última hora se unió el hecho de que ese mismo verano la RFEF había levantado la prohibición de fichar extranjeros vigente desde 1962. "Para colmo el Granada llegaba mermado porque Aguirre Suarez se había lesionado la jornada anterior. De la plantilla estaban fuera los centrales Aguirre Suárez, Pla y Castellanos, que se encontraba haciendo la mili, así que solo quedaba Fernández", relata Ramos. Para colmo tampoco estaba disponible el argentino Echecopar, la estrella del equipo que semanas antes había levantado la expectación entre una grada que coreaba aquello de "Ya verás, ya verás, cuando llegue Echecopar".

El partido

Poco se puede aportar de aquel partido que no se haya contado ya, aunque para refrescar la memoria nada mejor que escuchar al periodista, quien fue el primero en publicar cómo un ex internacional del FC Barcelona, y segundo entrenador de Rinus Michels, se acercó minutos antes al vestuario visitante del Camp Nou para pedirle a Pedro Fernández, a quien conocía de la etapa del paraguayo en Can Barça, que los defensas del Granada tuvieran 'clemencia' a la hora de aplicar su fama de equipo duro sobre el césped de 'L'Estadi'. "No te pedimos que lo dejéis pasar, pero que no se nos lesione ya en el primer partido", recupera de la memoria el periodista y escritor.

Sobre el césped, los catalanes impusieron la lógica superioridad que se les presuponía pese a que hasta aquella misma jornada, la octava de la temporada 1973-1974, se habían mostrado incapaces de superar en la tabla a los de Los Cármenes. Aunque terminó cantando el alirón con 'manita' histórica en el Bernabéu incluida, el Barça no empezó bien la Liga, y de hecho fue la llegada de Cruyff lo que catapultó a los azulgranas hasta lo más alto de la clasificación de Primera. Joseíto y sus hombres sí que tuvieron un buen arranque de curso. Y, no en vano, el Granada asaltó el primer puesto del campeonato en la quinta fecha, a la que llegó como único equipo invicto hasta el momento tras dos triunfos –en Atotxa ante la Real Sociedad (0-2) y en casa frente al Sporting (1-0)– y tres empates a uno: dos en Los Cármenes ante Real Madrid y Real Murcia y uno a domicilio en Castellón. Después vendrían tres derrotas seguidas ante Athletic Club (1-0), Zaragoza (1-2) y la consabida goleada por 4-0 en el Camp Nou.

Aquel triunfo, tal y como se ha reseñado líneas atrás, permitió a los azulgranas 'sorpassar' al Granada CF en la tabla en pleno arranque de la senda de imbatibilidad que desembocó en el título culé. Ramón Ramos no vio el partido porque en aquella época cuando jugaba el Granada fuera, el Recreativo normalmente lo hacía en Los Cármenes y tocaba cubrirlo. Sí puede dar fe del testimonio de quienes se calzaron las botas y saltaron a la hierba de la Ciudad Condal para disputar el choque: "Lo que dicen los jugadores es que todo fue absolutamente distinto. Cruyff revolucionó la Liga. Lo de que el Barcelona hubiera estado hasta entonces por detrás del Granada era un dato más indicativo de que el Barcelona estaba mal, más de que el Granada estuviera bien. Desde entonces, todo lo ganó y a veces empató, mostrando una superioridad absoluta. Fue la primera Liga del Barcelona en 14 años, desde el 1960".

Ramón Ramos explica que "Joseíto había improvisado ya con Fernández de libre y Montero Castillo de marcador de Cruyff, pero Montero Castillo no tenía la explosividad de Cruyff, por lo que sobre la marcha tuvo que rectificar". "Puso a Fernández encima de él y bajó a Jaén para ayudar. Aguantó muy bien la primera parte el Granada, pero faltando tres o cuatro minutos un centro se le escapó de las manos a Izcoa y Marcial abrió el marcador. Y ya a partir de ahí llegaron los demás. De uno se dijo que estaba en fuera de juego. Era una jugada milimétrica, nada fácil para el árbitro, de esas que con el VAR puedes ver pero que, aplicando el espíritu del reglamento, para mí son incluso legales", comenta.

Con todo, el veterano periodista no cree que aquel histórico sexto puesto del Granada en la temporada 73-74 sea comparable al conseguido en la 71-72 porque, en esta última, "demostró una gran regularidad que no fue tal en tres años después". "Lo del partido de Cruyff actuó como punto de inflexión. El Granada empezó siendo líder, luego se fue a puestos de descenso y, en mitad de la temporada, Candi renovó la plantilla en tiempo real al darle la baja a varios jugadores y fichar a otros cuantos. Este segundo sexto puesto se labró en la segunda vuelta", apunta.

¿Qué habría pasado si no hubiera jugado Cruyff?

Pero ante la accidentalidad del debut de 'El Flaco' justo ante el Granada cabe hacerse una pregunta: ¿Qué habría pasado si no llega a entrar a tiempo el transfer? ¿Habría tenido el Granada la ocasión de puntuar? Para Ramón Ramos, no, "pues los suplentes del Barça son mejores que los titulares del Granada y para ganarle a uno de estos equipos tiene que coincidir que tú tienes un buen día y ellos tienen el suyo malo". De hecho, explica el periodista, "demasiado bien parado salió el Granada con el 4-0 para las circunstancias del partido", con una defensa en cuadro y el Cruyff sobre el césped.

De lo que no duda Ramón Ramos es de la conversación que, días después, mantuvo con el cancerbero Izcoa en un bar de Camino de Ronda que solían frecuentar los jugadores que vivían por la zona. En esas aparecieron el malogrado Luis Oruezábal 'Chikito', Falito o el propio meta titular aquella tarde, quien le confesó al periodista que, en su opinión, Mariano Santos habría marcado bien a Cruyff. El de Cabezón de Pisuerga había abandonado aquel mismo verano la disciplina del Granada CF tras once campañas seguidas, incluida la 71-72, rumbo a Sabadell, donde jugó la última temporada de su carrera. Cosas del fútbol. El resto ya es historia.