Los coloridos y marchosos abuelitos de la artista Marina Capdevila llegan a Granada
La nueva residencia de estudiantes de Camino de Ronda estará lista para el próximo curso y la muralista catalana ha inundado de frescura su fachada
Granada, ciudad repleta de estudiantes cada curso, ha visto florecer en los últimos años varias residencias para cobijarlos a todos durante el curso. La más reciente, que será hogar de cientos de jóvenes a partir de septiembre, de cara al curso que viene, está siendo construida en el número 200 de Camino de Ronda, donde antes se encontraba un edificio que llevaba años abandonado.
Tras aproximadamente dos años de obras desde el derribo de dicha mole abandonada a su suerte, la calle que conectará el barrio de Los Pajaritos con Camino de Ronda, así como los parques y jardines que hay alrededor permitirá pasear a los granadinos dentro de poco (previsto para finales de año) por la zona, ya que el proyecto está prácticamente listo.
La marca Livensa Living, perteneciente a la inmobiliaria Temprano Capital S.L., constructora de esta residencia y de la inaugurada hace apenas un curso, ubicada en el Campus de Cartuja, apuesta por el arte urbano para ilustrar las fachadas de sus edificios bajo el programa Urban Art. Para ello, Rebobinart, entidad cultural barcelonesa fundada en 2012 y especializada en la producción de este tipo de arte a nivel profesional y en gran formato, ha sido la encargada de contratar a la muralista Marina Capdevila, que se ha encargado, acompañada de su música que tanta paz le aporta, de plasmar sus coloridos y clásicos abuelitos en el gran muro de la residencia, así como en una pared del interior, como se puede ver en el vídeo que acompaña a esta noticia, disponible en el canal de Youtube de GranadaDigital.
Natural de un pueblecito de Barcelona, Capdevila ha sido la primera mujer en trabajar en el proyecto de Livensa Living, ha llevado a cabo la ejecución del proyecto junto a dos ayudantes durante unos doce días y tiene previsto terminar la obra este sábado. Esta joven artista tiene un estilo, narrativa y una estética visual que ilustra la vejez de forma cómica. El público podrá ver el mural totalmente finalizado una vez terminada la construcción de la residencia, poco antes de su apertura oficial prevista para el próximo curso.
La lluvia caída durante esta semana, este miércoles y prevista también para esta jornada, ha retrasado un poco la fecha de finalización del proyecto, prevista, en un principio, para este viernes. Sin embargo, los colores anaranjados del mural inundan de calidez el ambiente y de ternura con la presencia de los ancianos tan marchosos que representa la barcelonesa. "Normalmente, me inspiro en las personas mayores porque me gusta darles la visibilidad que no tienen y que se merecen en la sociedad. Pensé en hacer esta señora mayor a la que le salen pájaros de la cabeza como un guiño al barrio de Los Pajaritos y también por el hecho de hacer el mural en una residencia, para que los estudiantes dejen volar las ideas, sean creativos y que no tengan miedo", explica la joven artista. Además, "la abuelita es muy juvenil, con un punto cañero, con las gafas, la cadena, tatuajes...para que los estudiantes se sientan identificados", continúa. El objetivo de la catalana es simple: transmitir un mensaje social y cultural en su proyecto, con un toque juvenil que unifique distintas generaciones.
Es la primera vez que Capdevila ha trabajado en un proyecto en una residencia de estudiantes. Anteriormente, ha realizado uno en una de ancianos, en Gerona, además de múltiples colaboraciones con marcas y festivales en México, Brasil, Estados Unidos, además de en diversos países de Europa.
El mural, con un total de 30 metros de alto y diez de ancho, pone de manifiesto la voluntad de agregar un valor cultural al paisaje urbano a través del arte en esta nueva zona de la ciudad. El objetivo del proyecto es constatar la necesidad de que el desarrollo urbanístico se integre en el territorio y aporte al tejido urbano un retorno patrimonial artístico a través de la intervención de muralistas de renombre internacional.
Con esta renovación visual en la residencia de estudiantes, se ha pretendido fomentar una visión del arte urbano profesional para una dinamización social y cultural con la creación de proyectos que tengan que ver con el territorio en concreto. Además, desde Rebobinart pretenden desestigmatizar al arte urbano, considerado clásicamente como un acto vandálico.
De esto habla Marc García, director de Rebobinart: la idea de crear esta empresa surgió de la búsqueda de muros en los que crear murales artísticos. García explica que en los primeros años del siglo XXI había unas restricciones muy fuertes para evitar la pintada de paredes públicas. No obstante, el muralismo no es lo mismo que los grafitis, ya que, según explica este barcelonés, el primero es legal y se trata de un trabajo remunerado, mientras que los segundos son dibujos, principalmente letras, realizados fuera de la ley.
"Los muros legales disponibles favorecen los productos finales de calidad, aunque es más fácil que pinte cualquier persona, sea bueno o malo", añade García. Como curiosidad, el director de Rebobinart expone que la mayoría de grafiteros son hombres, mientras que, en el mundo del muralismo, hay muchas más mujeres.
En relación al proyecto creado por Livensa Living, "a nosotros nos pareció una idea muy innovadora porque siempre nos pasa lo contrario: nosotros tenemos que buscar un edificio para pintarlo y aquí nos han buscado", comenta Marc García. Asimismo, estos murales dan "dinamismo" a los edificios, ya que, "la pintura se va, así que dentro de unos años, otro artista tendrá que pintar la fachada".