El comercio de Granada ante el Black Friday: "No será la panacea"
El sector prevé una tendencia a la baja ante la pujanza de plataformas como Amazon: "Nos vemos obligados por la presión de las ventas digitales"
Viernes negro, números negros para los comercios. En el buen sentido. Porque aunque pueda sonar funesta, esta última frase tiene una connotación positiva. El origen etimológico de la expresión 'Black Friday' alude a aquellos tiempos en los que los negocios norteamericanos conseguían equilibrar sus balances y cuentas de resultados convirtiendo al negro lo que antes eran números rojos. Pero, cuidado, porque no es oro todo lo que reluce y la tendencia va menguando cada año. O al menos en España, con un pequeño mercado atomizado al que le resulta prácticamente imposible competir con las suculentas ofertas y ganchos de las grandes superficies.
Y es que hasta las costumbres consumistas tienen su techo. Máxime cuando vienen importadas de fuera y no responden a una tradición propia y verdaderamente asentada en los hábitos y rutinas del comprador. La dificultad de las familias para ahorrar ante el encarecimiento de la vida, la percepción de este periodo como una herramienta más de persuasión que de necesidad real o la creciente conciencia social frente al 'efecto impulso' ejercen como freno para un fin de semana de compras, el que transcurre desde el mencionado Black Friday hasta el no menos chic Cyber Monday, en el que el comercio local sufre aún más las consecuencias del cambio de paradigma.
Así lo trasladan desde la Federación Provincial de Comercio de Granada. Su secretario general, Miguel Moreno, alerta de que la diferencia entre el pequeño comercio y las grandes superficies se ensancha cada vez más. No en vano, comenta a GranadaDigital, "la tendencia en toda España es que cada vez menos comercios se sumen a este periodo de descuentos". Así, Moreno matiza que, más que por rentabilidad real, los pequeños comercios se apuntan a la moda de lo anglónimo "arrastrados por la presión de las ventas digitales": "No es una venta que vaya a representar un beneficio muy importante, ya que se trata de artículos muy determinados por el hecho de comercializarse a través de plataformas digitales".
El representante del sector local también desvincula esta merma con una supuesta incapacidad del autónomo o la pequeña y mediana empresa para emprender el camino hacia la digitalización. El problema real es el de siempre desde que el mundo es mundo y el dinero, dinero; antes de que internet o términos como 'B2C' aterrizaran en las transacciones: "Ni en stock ni en márgenes digitales podemos competir con una plataforma como puede ser Amazon".
Un consumidor más "selectivo, pausado e inteligente"
La razón no radica solamente en las economías de escala, sino en la nueva mentalidad del consumidor, que cada vez es más "selectivo, pausado e inteligente con las compras". "Una tónica que apreciamos desde principios de año es que es muy selectivo y va a comprar sólo aquello que sea necesario. Por tanto, este Black Friday no será la panacea para el comercio local", se aventura a predecir Moreno, quien se muestra cauto a la hora de hacer una pronóstico exacto: "Con la subida del IPC, hemos tenido que trasladar nuestros márgenes y no podemos hacer una estimación de beneficios".
Precisamente la inflación fue la responsable de que la campaña de compras anticipadas de Navidad en 2022 arrancara con malas perspectivas para el sector. No obstante, el secretario general de la Federación Provincial de Comercio confía en "esperar a ver qué ocurre" y en que una vez más los granadinos sepan "valorar esa cercanía que los pequeños comercios ofrecemos". El hecho de que sólo un año antes, con el fin de la pandemia aún en ciernes, el panorama pintara mucho más optimista habla de la cada vez más frenética rapidez con la que el mercado evoluciona. Circunstancia motivada por un incesante aumento de la globalización económica.
No en vano, aunque la actual campaña del Black Friday aumentará la contratación en la provincia de Granada, se espera que genere un 5,7% menos de acuerdos laborales que en 2022, tal y como apuntan las agencias de trabajo temporal: "Del sector físico, en el comercio local, los que más se beneficiarán serán los negocios de electrodomésticos y textil. Quienes han apostado por lo digital, un poco igual". "Realmente, la gente espera un poquito de tiempo si necesita algo y cada vez menos personas aprovechan este periodo para adelantar las compras navideñas. Al final, en la mentalidad del consumidor subyace la idea de que lo que está haciendo es soltar antes el dinero, salvo en situaciones muy concretas como puede ser comprar un electrodoméstico que se ha averiado, que ahí sí se espera al momento en el que se produce descuento o la rebaja", aclara Miguel Moreno.