Los comercios de los mercados acusan la inflación en las ventas de productos navideños
Establecimientos como carnicerías o pescaderías se ven afectados estas fiestas por la subida de precios y la vuelta a la normalidad tras la pandemia
Quique Briz Farran
Cada vez queda menos para las cenas de Navidad y los mercados se preparan estos días para vender todo tipo de productos para las mesas granadinas. En el mercado de San Agustín, uno de los más emblemáticos de la capital, los establecimientos tienen que luchar contra la subida de precios, a la par que se ven afectados por la vuelta de la normalidad tras dos Navidades inusuales por la pandemia.
La inflación por la que actualmente pasa España -la más alta de su historia- es algo que se está notando en todos los productos y los pequeños comercios de los mercados también se ven perjudicados en estas Navidades. En un reciente informe de la OCU, se llega a la conclusión de que los productos alimentarios son un 15% más caros que el año pasado. Se trata de artículos básicos como la leche, los huevos, el pan o la carne. Algo que afecta profundamente en según qué negocios del mercado.
Las carnicerías, afectadas por la subida de sus productos, deben resistir. Nieves, dependienta de uno de los establecimientos de este tipo en el mercado de San Agustín, cuenta que "la afluencia de gente en la tienda ha bajado un poco porque el bolsillo no está igual". La carne, que ha subido entre un 13 y un 14% según el estudio mencionado, es un elemento básico para las cenas de Navidad y los consumidores lo notan. En el caso de su comercio, los productos más demandados en estas fechas son el pavo o el solomillo de cerdo, carnes que no son excesivamente caras pero que se van afectadas por la inflación. "Estos productos jamás habían subido de precio", cuenta Nieves.
En el establecimiento Casa Carmina, dedicado a la venta de embutidos, la inflación se ha notado únicamente en algunos productos. Ricardo, trabajador de la tienda, asegura que "hay ciertas cosas que han aumentado de precio con la inflación, pero hay otras que se han mantenido todo el año, como es el caso del jamón ibérico". En cambio, en otros productos muy demandados en su local como los quesos, los patés y el foie, las subida de precios sí que se ha notado.
"El pescado depende de lo que salga del mar"
En las pescaderías, otro negocio con mucha actividad en las compras navideñas, hay productos que han aumentado su precio, especialmente el marisco. En la Pescadería Concha han notado que "hay cosas que han subido muchísimo", tal y como cuenta su dependienta, Ana. Sin embargo, se trata de un sector que depende mucho de la demanda. "El pescado depende de lo que salga del mar. Si hay mucho está más barato, y si hay poco está más caro", aclara.
Otros comercios que viven de los productos navideños son las tiendas de dulces. En el Horno del Progreso, algunos de los productos más demandados en estas fechas son los Danielitos de Cónchar, turrones, polvorones, roscos o Panettones. En este sector también han aumentado los precios. Aún así, en este local "ha tenido buena aceptación, porque es una subida general de todos los productos", explica Rosario, dependienta del establecimiento. "No hay quejas de que está todo muy caro. Cuando las subidas son en productos concretos, como el pan, si hay más problemas", asegura.
"Si gastas en un sitio, no puedes gastar en otro"
La inflación no es lo único que afecta a este tipo de establecimientos. El hecho de que esta Navidad vuelva a tener una plena normalidad después de las de 2020 y 2021, donde las restricciones para frenar el virus no permitían ciertas cosas, hace que la situación cambie. Algunos negocios afirman que todo es más sencillo a la hora de recibir más clientes. Sin embargo, otros aseguran que la situación es contraproducente.
Desde la Pescadería Concha afirman que "en la pandemia, como se sale menos, la gente cenaba más en casa e incluso compraba más que ahora". Mientras, en la carnicería, argumentan que "hay más vida, pero para salir de bares, porque el sueldo es el que hay. Como la gente ha estado encerrada, prefiere salir. Y si gastas en un sitio, no puedes gastar en otro. A las dos y media de la tarde están todos los bares a tope, pero los comercios vacíos", explica su dependienta.
Otro problema que afecta a los negocios este año es el calendario. Como las cenas y el día de Navidad han caído en fin de semana, disminuye la cantidad de gente que se puede acercar al mercado en los días previos para comprar los productos que acabarán en su mesa. Aún así, los negocios de los mercados seguirán luchando para crecer a pesar de todas las adversidades.
