Comienza la vigésimo quinta edición del Festival Sónar
El Niño de Elche destacó en la primera fecha del prestigioso evento
Por fin comenzó la esperada 25ª edición del festival Sónar, Music, Creativity & Technology. Todo ha comenzado con el Sónar de Día en la Fira de Montjuic, Barcelona. Espléndido día para comenzar bien temprano a degustar todo lo que ofrece este certamen, que no es poco. Como manda la tradición, hay que llegar bien pronto al recinto para echar un vistazo por los stands de Sónar+D, con especial parada en los que ofrecen al visitante una relación activa con el producto presentado, tales como Native Instruments y sus vanagloriados productos para la producción musical Maschine o Elektron, la compañía sueca que ha liderado la vuelta de lo analógico en el hardware musical.
Tras un vistazo por todos los stands, tocaba ver las instalaciones que este año presiden el Sónar+D. Sonar360º, es una instalación bajo el patrocinio de Mediapro. Una carpa circular, media esfera u óvalo de buen tamaño donde en la cúpula se proyectan diferentes piezas audiovisuales, mientras los espectadores se tumban en la moqueta instalada a tal efecto para que la experiencia sea más placentera. Una maravilla si tu espalda aguanta los minutos necesarios para percibir la belleza de los films.
Sónar Calling, es una instalación, un espacio diseñado para descubrir los aspectos artísticos y científicos del viaje de 12,5 años luz que transportará la música electrónica enviada al espacio exterior, al exoplaneta Luyten’s Star b.
Acto seguido y tras reconocer estos espacios que dan lugar al recogimiento, ensimismamiento o a la concentración, nos disponíamos a explorar el cartel que nos ofrecía el Sónar de Día.
Kode9 x Köji Morimoto AV
Steve Goodman nos presentó este año en Sónar una sesión plagada de sonidos arcade, con sus típico grandes bajos capaces de empujarte o lo que se llama, sentir físicamente la música. Unos sonidos de videojuego en forma de homenaje al ilustrador japonés Köji Morimoto y toda su música japonesa. Unos visuales basados en todo el trabajo de Morimoto acompañados por la música de Kode9 hicieron las delicias del público del SónaDome. Un set complicado, en la línea experimental de Kode9, que hace un par de años visitó el Sónar dándonos una vuelta por un hotel virtual. Steve nos tiene acostumbrados a lo inusual de sus ritmos y melodías, pero quien se resiste a los empujones por debajo de los 50 Hz.
Despacio (James Murphy + 2manydjs)
James Murphy (LCD Sounssystem y los hermanos Deawele de Soulwax) nos presentan un set por el puro placer de oír música de club, en un club de toda la vida, con un excelente sonido, nosotros diríamos más, uno de los mejores sonidos que hayamos escuchado jamás. 50,000W de potencia distribuidos en ocho torres de altavoces y amplificadores de más de tres metros de altura, una auténtica locura. Una experiencia exquisita para el oído, no tanto para la vista, ya que la oscuridad que hay en el pequeño recinto no permite siquiera ver si tienes a alguien delante y claro, parece más una pista de autos de choque.
Sinjin Hawke & Zora Jones - AV Live
Un live a cuatro manos, una música futurista, con baño de bajos y ritmos contundentes. No obstante, son los responsables de Fractal Fantasy, plataforma desde la que publican su música y la de otros artistas en la misma línea. Interesante interactuación en vivo con los visuales, dado que una cámara tomaba imágenes en directo, plasmando a través de software unas imágenes totalmente retocadas y futuristas. Interesante, pero sin mucha alma, el público agradeció la entrega de los chicos, pero no se vio una unión entre emisor y receptor como para llegar al baile colectivo.
Little Simz
Simbiatu Ajikawo es una joven vocalista, actriz y rapera londinense, de padres nigerianos, a la que se le puede seguir la pista exclusivamente a través de su propio sello AGE:101. Acompañada por un dj, un batería y un teclista, derrocharon energía, ganas de pasarlo bien y calidad, mucha calidad. Se notó que la británica vino al Sónar a darlo todo. Espectacular actuación, con continuos agradecimientos a un público rendido a los componentes de la banda y a la propia Simbiatu. Nos bañaron con agua (primeras filas), nos hicieron cantar, nos hicieron bailar, mover las manos, un selfie colectivo, en cualquier máster de “cómo ganarse al público” tendría que estar esta actuación. Diversión, hip hop, dance, trance, un descubrimiento sin duda.
El Niño de Elche & Israel Galván
Esta es una asociación natural entre dos artistas heterodoxos y revolucionarios que tenía que llegar tarde o temprano. Tras varias colaboraciones de Francisco Contreras (Niño de Elche) en los espectáculos del artista Israel Galván, crean un primer espectáculo conjunto que estrenaron en Sónar. y que espectáculo. Fuera de convencionalismos, quien conoce al Niño de Elche sabe, que puede hacerte el ser más feliz o directamente hacerte vomitar en el mismo momento. Esto sucedió el anterior año con su espectáculo presentado. Lo abrupto, visceral de sus imágenes hicieron a más de uno abandonar el SonarComplex precipitadamente, para con posterioridad perderse un final de concierto épico. Así es el Niño de Elche, un artistazo, pese a quien pese y un innovador como no lo hay en el país. Lo demostró en su concierto de esta edición. Mejor llamarlo su show, porque hubo baile, mucho baile, percusión, cante, performances, sentimiento, humor… Un completo espectáculo que va mucho más allá de la música y del flamenco. convencido que los puristas de este arte no comprenderán dicho show, hemos de calificar al tándem Israel Galván y El Niño de Elche como el tándem más inteligente y ocurrente del momento en la escena artística del país. Absolutamente recomendable. Un nuevo triunfo de dos artistas que juegan en otra liga, superior sin duda.
George FitzGerald
El británico que vivió el nacimiento del dubsteb, acudió al SonarVillage acompañado de una banda de músicos, para sacar más partido a sus nuevas composiciones en directo. Unas melodías y armonías preciosistas que dan un empaque tremendo en directo a su propuesta. Con un público totalmente entregado a la diversión y el baile, no le fue difícil al artista llevar al mismo trance a los miles de personas que allí disfrutaban de tema tras tema, house, base music, garaje, baile y emoción. El productor londinense triunfó dejando a todo el público calentito para el fin de fiesta programado para Laurent Garnier, pero esto sería otra historia, la que comentamos, acababa aquí.