¿Cómo sobrevivir a la Navidad estando embarazada?

Las comidas contundentes con especias o muy condimentadas son los peores acompañantes de estas fiestas para estas mujeres

embarazo
Foto: Archivo
Sarai Bausán García | @Sarai_Bausan
0

Llega la Navidad y, con ella, las grandes comidas. Es una situación que se repite año tras año en todos los hogares. Y, tras esto, la sensación de empacho que se acentúa tras ingerir esos platos llenos de comida que presiden la mesa. Una situación que se muestra aún más pronunciada en las mujeres embarazadas.

Y es que, tal y como afirma la experta en cuidado por y para la mujer Flor María Trujillo, las mujeres embarazadas suelen tener las digestiones mucho más lentas debido a su estado, lo que provoca que se sientan muy pesadas en poco tiempo.

Los platos que son más indigestos para ellas, según muestra la también Diplomada en Fisioterapia y Osteopatía, son las comidas muy condimentadas, las que poseen mucho ajo o especias, los preparados muy calientes o muy fríos, los fritos, los dulces, los pescados o carnes crudas, los ahumados y los embutidos.

Pero, a pesar de lo que pueda parecer, este hecho no hace que las mujeres embarazadas no puedan disfrutar de un buen manjar en estas fiestas. Para que la temida sensación de empacho no se haga con estas mujeres Flor María Trujillo aconseja fraccionar las comidas, evitar los platos que hemos señalado y mantener en todo momento la postura erguida, ya que evita el ardor.

Asimismo, tanto estas mujeres como cualquier persona debería sustituir las comidas copiosas por otras más ligeras como carnes y pescados bien cocinados, siendo las carnes más adecuadas el pollo y el pavo y los mejores pescados el salmón y bacalao. “El jamón serrano se puede tomar con total seguridad durante el embarazado sin necesidad de congelarlo previamente, tanto el ibérico o de bellota como el jamón serrano regular”, añade Trujillo.

Sobre un aspecto que se muestra tajante Flor María es en el consumo de alcohol o tabaco durante estas fiestas. Sobre este asunto señala: “Está totalmente contraindicado. Puede tener consecuencias graves sobre nosotras mismas y, sobre todo, para nuestro bebé”.

En estas fechas no solo se cambia el menú, sino también la indumentaria. Así, la tradición hace que se saquen las mejores galas para tener un aspecto impecable en los momentos más señalados. Una situación que hace que las mujeres, en ocasiones, se pongan tacones y ropa ajustada. “Hay que evitar este tipo de indumentaria cuando se está embarazada. Los tacones pueden agravar la lumbalgia o el dolor de espalda y la ropa ajustada puede empeorar los edemas, los pies hinchados y las varices y puede provocar que las hemorroides sean aún más molestas y dolorosas”, destaca Flor María Trujillo.

Así que si estás embarazada y quieres vivir las fiestas sin tener que preocuparte de cómo te sentirás al día siguiente, no lo dudes, lo mejor es evitar las comidas copiosas, llevar ropa cómoda y no tumbarte tras la ingesta. Siguiendo estos pasos, conseguirás decir adiós a los empachos típicos de la Navidad.