Los concesionarios de Granada se adaptan a la crisis de los semiconductores

La falta de chips en el proceso de fabricación de vehículos supone un varapalo para el sector de la automoción y retrasa los plazos de entrega

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Imagen del interior de Vigilsa, el concesionario de Seat en Granada | Foto: Dani B.
María José Ramírez
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La escasez de semiconductores golpea con fuerza a las fábricas de coches, que han reducido su producción con respecto a 2020, y mucho más si se compara con 2019, y que no esperan una normalización hasta finales de 2022. La crisis de los semiconductores ha provocado pérdidas millonarias para el sector de la automoción, que se ha visto muy afectado también por la crisis de la pandemia del Covid-19. La escasez de semiconductores ha hecho que no se puedan incorporar los chips al proceso de fabricación de los vehículos. Esto afecta directamente a los concesionarios, especialmente en los plazos de entrega de los vehículos.

“Los coches son los primeros que están sufriendo la escasez de semiconductores por el modo de fabricación debido a la pandemia y eso se está traduciendo en retrasos en la fabricación y en escasez de vehículos en stock por lo mismo, por la escasez de materia prima”, comenta el jefe de Ventas de Autiberia, el concesionario de Opel en Granada. Javier Martín asegura que en Opel han priorizado que “aquellos vehículos que tengan un pedido de cliente a fábrica, tengan preferencia a aquellos vehículos que son stock de concesionario”. “Ya estamos consiguiendo tener vehículos en dos meses o tres desde la fabricación si el cliente hace un pedido en firme. Solamente los vehículos comerciales van a sufrir un retraso un poquito mayor a tres meses, estará en torno a unos cinco meses, por la demanda tan alta que tienen este tipo de vehículos”, añade.

También se han demorado los plazos de entrega de vehículos en el concesionario Mercedes Benz en Granada como consecuencia de la crisis de los semiconductores. ”Hay unidades que nos pueden llegar con problemas de algunas opciones como consecuencia de la falta de suministro”, asegura Jorge García, el jefe de Ventas del concesionario. Dependiendo del modelo, la demora puede ser mayor o menor. “Hay algunos a los que les afecta más y a otros, menos. Depende mucho del lugar de fabricación. En algunos casos, nosotros tenemos vehículos de Estados Unidos y lo sufrimos menos y luego hay otros vehículos que sí lo sufren más, pero no podría decir qué modelo más y cuál menos”, añade.

En Vigilsa, el concesionario de Seat y Cupra en Granada, se han ido adaptando a esta situación. “La marca se ha adaptado a la producción en función de los semiconductores que más a corto plazo se producen. Hemos eliminado algún tipo de opcionales, como puede ser el enganche de remolque, que no es un elemento esencial de manera prioritaria a la compra, porque se puede montar con el tiempo, o algún tipo de elemento para poder aminorar el tiempo de entrega de nuestros coches”, afirma Francisco Ruiz, el director de Ventas de Vigilsa, que asegura que Seat es uno de los fabricantes que entrega sus coches “con más corto plazo dentro de la situación que hay”. “La mayoría prevén una entrega de entre seis y siete meses y nosotros tenemos plazos de entrega, según el modelo, de mes y medio o dos meses”, añade.

Esta crisis de los semiconductores “no la podía predecir ningún fabricante”, según Francisco Ruiz, ya que la compra de este tipo de semiconductores se realiza “de un año hacia otro” y el año anterior “pilló en una situación de pandemia y ningún fabricante tenía estimación de que el mercado realmente iba a seguir al ritmo que va”. “Ellos buscaron otras alternativas de proveedores, pero entre el exceso de demanda de chips durante la pandemia y el descenso de producción por motivos del Covid-19 en los países que se fabrican, se ha formado un cuello de botella impresionante”, agrega el director de Ventas de Vigilsa.

La marca KIA, por su parte, ha conseguido mantener su flujo de producción y comercialización con entrega inmediata al cliente a pesar de esta crisis ya que tiene garantizado el suministro. “No estamos teniendo ninguna limitación derivada de la misma porque los proveedores con los que cuenta el fabricante son locales, coreanos, y tienen esa prioridad de proveer a su propia marca”, asegura Alejandro Castilla, gerente de ARM Motor, el concesionario de KIA, Mazda y Mitsubishi en Granada, quien añade que no tiene “ningún tipo de situación diferencial respecto a hace un año o año y medio en lo relativo a esta crisis de suministro” ya que “casi todos” sus modelos cuentan con “disponibilidad inmediata” y “el cliente puede llevarse el coche uno o dos días después de cerrar la operación” o si no tienen esa disponibilidad, la entrega “no excede más de una semana”.