Monsieur Rousselle asalta la Fonteta para dar la quinta a Covirán (75-81)

Victoria de ensueño para el Covirán Granada. Los rojinegros al fin han dado la tan deseada sorpresa al asaltar la Fonteta en un encuentro liderado por un estelar Jonathan Rousselle. El base francés supo liderar a su equipo a pesar de las bajas de Lluís Costa por unas molestias en la cadera y la de última hora de David Kramer por un fuerte proceso gripal, contratiempo que dejó a los rojinegros con solo diez jugadores en su rotación. Aunque si de algo sabe este equipo es de luchar contra la adversidad. Pablo Pin optó por darle el protagonismo y el liderazgo a un Jonathan Rousselle que piensa hacerse con la llaves de la Alhambra.

Todo el juego granadino pasaba por un base francés tocado por una varita mágica desde que aterrizó en Granada. Su rapidez y capacidad para asistir en carrera permitió a Covirán Granada sobrevivir en unos primeros minutos marcados por la imprecisión en ataque y la fuerte defensa taronja. Castigaron Kassius Robertson y Brandon Davies a los rojinegros en los primeros compases del partido. Con el 14-7, Pablo Pin paró el encuentro para reactivar a sus jugadores de la mano de Rousselle y de un Evaldas Kairys brillante y entendiéndose a la perfección con el base francés para cerrar el primer cuarto con un esperanzador 20 a 18.

El duelo en la Fonteta se debía tomar minuto a minuto. Cualquier mínimo despiste podía dar alas a un Valencia Basket que se jugaba su certificación como candidato a la Copa del Rey. La entrada en pista de Christian Díaz por Rousselle dejó unos minutos de imprecisiones y errores tanto en ataque como en defensa que, gracias a tampoco excelso ataque taronja, no se convirtió en una sentencia para los de Pablo Pin. Los locales no terminaban de encontrar la excelencia en su juego. Tampoco en su defensa, algo que permitió a Covirán seguir vivo en un partido que prometía estar igualado hasta el final. Díaz fue cogiendo el ritmo al partido para, con la compañía de Rousselle en pista darle la vuelta a un encuentro que Valencia fue dejando ir poco a poco. Mención especial merece Evaldasa Kairys, capaz de leer a la perfección las mínimas ventajas que dejaba la defensa rival y aprovechando los fallos ofensivos de los taronjas para darle rapidez al juego granadino y cerrar la primera mitad con dos puntos de ventaja que sabían casi a victoria (35-37).

Lo peor ya se había superado. Entrar en la segunda mitad con opciones y, además, con dos puntos de ventaja, era un gran punto a favor para el Covirán Granada. Valencia Basket supo aprovechar los despistes de los rojinegros para generar pérdidas y empatar el partido. Con la máxima igualdad, apareció el de siempre, Cristiano Felicio. El pívot brasileño firmó los primeros seis puntos del tercer periodo para colocar el 40 a 43 en el marcador. Joe Thomasson al fin entró al partido con su primer triple para colocar el 40 a 46 y firmar, acto seguido, los mejores minutos de Covirán Granada.

Valencia Basket no encontraba su mejor versión. Los taronjas basaron su ofensiva en el juego interior pero la zona estaba dominada por un Cristiano Felicio estratosférico. Sin presencia en el triple y con la anotación estancada, el Covirán Granada logró en un abrir y cerrar de ojos colocar el 44 a 52 gracias a dos canastas consecutivas de Pere Tomàs tras asistencias de Rousselle y Thomasson. Los rojinegros al fin estaban compartiendo el balón como saben. La superioridad granadina llevó a Álex Mumbrú a parar el encuentro buscando una reacción de los suyos que condujese el encuentro. En su intento de remontada, los locales se encontrarían con don Jonathan Rousselle. Asistencias, rebotes y puntos, el base francés lo dio todo para decir bien alto que está posible quinta victoria era suya (49-60).

Era casi una ilusión, un sueño del que nadie quería despertar. Ganar de once en la Fonteta a falta de diez minutos para concluir el encuentro era el mejor guion jamás pensado para un Covirán Granada sin complejos y deseoso de olvidar lo antes posible la aplastante derrota de Málaga. Thomasson también quería su cuota de protagonismo que llegó con un triple que puso la máxima ventaja en el marcador. Con el 49 a 63, los de Pablo Pin se las prometían felices, pero aun quedaba mucho partido. Valencia no bajó los brazos y la mano de Davies y Jones trató de forjar una remontada que quedaría en la orilla. Reuvers anotó un triple que dio el primer susto a Covirán Granada. Con la distancia reducida a siete puntos empezó el juego de la moral y aquí los rojinegros tenían todas las de ganar. Los minutos acumulados tras cinco partidos en poco más de una semana pesaron demasiado a los de Alex Mumbrú, especialmente desde el tiro libre donde un paupérrimo 9 de 18 los acabaría condenando a la derrota. Creyó más Covirán en la victoria. La sorpresa debía llegar tarde o temprano (75-81). El regalo de Papá Noel se ha adelantado para un conjunto rojinegro que ha firmado su quinta victoria de la temporada en un partido de ensueño. Como dijo Rousselle tras acabar el partido, todo está en la mente, este equipo es capaz de vencer a cualquiera, solo hay que creérselo.

Ficha del partido:

Valencia Basket: Puerto, Inglis, Jovic, Robertson, Davies - quinteto inicial - Reuveurs, Pradilla, López-Arostegui, Jones, Ferrando, Touré, Hermannsson

Covirán Granada: Cheatham, Rousselle, Felicio, Tomàs, Thomasson - quinteto inicial - Díaz, Kairys, Martínez, Iriarte, Konontsuk

Parciales: 20-18; 15-19 - descanso - 14-23; 26-21

Árbitros: Juan Carlos García González, Arnau Padrós y Alberto Baena