La cara B de Covirán Granada vuelve a aparecer para perder en la Fonteta
Las pérdidas y la falta de acierto en el triple condenaron a un conjunto rojinegro que mostró una versión totalmente opuesta a la de hace una semana
Partido atípico en la Fonteta. Por antecedentes, plantilla, presupuesto y un sinfín de factores más, Valencia Basket debía, a priori, dominar sin problemas en su duelo ante Covirán Granada, pero el transcurso del juego dictaminó todo lo contrario. El mal juego de ambos equipos en la anotación dejó una primera mitad sorprendentemente igualada. Arrancó Radebaugh con una gran efectividad y soltura de cara al aro. Cinco puntos consecutivos del jugador taronja daban una ligera ventaja a los locales que solo pudo contestar Alex Renfroe con un 2+1. Covirán Granada no era capaz de mostrar la intensidad defensiva que lo llevó a la victoria hace solo una semana contra Gran Canaria.
La rotación del banquillo rojinegro permitió a los de Pablo Pin meterse en el partido poco a poco. Petit Niang dio un paso adelante para acercar posturas, pero Valencia Basket seguía anotando con demasiada facilidad. De la mano de Bojan Dubljevic y Webb III, los locales se pasearon a sus anchas por su parqué dejando a los granadinos casi sin respuestas. La entrada de Mike Moore y Youssou Ndoye dio vida a Covirán Granada. Toda una sorpresa para los aficionados rojinegros ver como los fichajes de invierno tiraban de un conjunto visitante que mentalmente no estaba en el encuentro. Gracias al americano y al senegalés, Covirán llegó a cerrar el primer cuarto con tan solo dos puntos de diferencia (20-18).
El ajuste de la defensa en la salida de balón del plantel valenciano y el poder encontrar, al fin, los huecos necesarios para dominar la zona permitieron a Covirán Granada plantarle cara a un Valencia Basket que no estaba mostrando su mejor versión, pero que vivía de los errores de su rival. Los de Mumbrí arrancaron el segundo periodo con un 4-0 de inicio, pero entraron en una especie de bloqueo mental que los rojinegros aprovecharon para igualar el encuentro e incluso ser superiores en determinados momentos.
Ndoye continuó acaparando los focos en la zona taronja. El pívot senegalés firmó una de sus mejores actuaciones como rojinegro, dando parte de la intensidad y la fuerza que se le pedía para proteger los aros. En el plano ofensivo no estaba siendo un periodo excesivamente bueno para los granadinos, sobre todo, por los ocho puntos anotados en seis minutos de juego, pero sí conseguía reducir los porcentajes de su rival para mantenerse vivo en el partido. El inexistente acierto desde la línea exterior para ambos equipos tuvo un leve impás con el triple de Webb III y la contestación de Alex Renfroe. Tras unos minutos finales donde los errores se sucedieron, Bropleh cerró el periodo con un segundo triple que dejaría el marcador en el 38-34.
El partido no estaba siendo excelente por ningún lado. Ni Covirán Granada estaba dando esa versión que tanto gustó y sorprendió ante Gran Canaria, ni Valencia Basket mostraba el juego lógico de un equipo de la zona alta de la tabla y de Euroliga. Se podría decir que la actuación de ambos equipos era un auténtico despropósito, aunque a veces no se trata de jugar bonito, sino de anotar más puntos que tu rival. De regreso al parqué, los de Mumbrú dieron un paso adelante ante la clara, temida y habitual desconexión de un Covirán Granada perdido en territorio taronja.
Valencia Basket golpeó sin piedad a un plantel rojinegro que volvía a tirar todo lo conseguido en la primera mitad del encuentro por las malditas pérdidas. La ventaja en el marcador se fue abriendo poco a poco hasta los diez puntos. Reaccionó brevemente Covirán Granada de la mano de Niang y Renfroe. Por un instante parecía que la igualdad se volvería a instaurar en el juego. Nada más lejos de la realidad. Los taronjas le cogieron la medida a un plantel granadino que no era capaz de frenar ni un solo ataque de su rival. Anotando a placer, sin esfuerzos y con una facilidad pasmosa, Valencia Basket firmó la victoria ya en el tercer cuarto. No le hacían falta los triples, con presionar un poco la zona ya podía anotar sin complicaciones. Solo se salvaba un Ndoye de dulce que cerró el tercer periodo con 16 puntos en su casillero. Eso sí, sin un solo rebote (62-52).
Diez puntos de diferencia no es nada en baloncesto, es una distancia salvable, siempre y cuando se esté acertado en el ataque y, lo más importante, concentrado en la defensa. Abrió el marcador rojinegro nuevamente Ndoye con un 2+1 para reducir la brecha a los siete puntos. Quedaba todo un mundo por jugar, pero este no sería el día de los rojinegros. De un casi robo de Caicedo a una antideportiva de Thomas Bropleh que acabó con cinco puntos para los de Mumbrú. Desde ese momento, Covirán Granada luchaba por evitar que el resultado final fuese demasiado abultado. Se mantenía levemente vivo el conjunto rojinegro, se confiaba en poder darle la vuelta al encuentro, pero la reacción llegó demasiado tarde. Finalmente el resultado no fue tan duro como se podía esperar, pero la derrota fue real (80-72).
Perder en la Fonteta era lo más lógico que podía ocurrir. La derrota quizás no sorprende, pero sí la forma en la que se ha consumado. Después de ganar a Gran Canaria con la solvencia y la seguridad que mostraron en el Palacio, casi no se puede comprender lo visto en la tarde de este domingo en la Fuente de San Luis. Cómo un equipo puede, en apenas siete días, mostrar dos versiones tan opuestas. Valencia no hizo el mejor partido de su temporada y aun así ha podido vencer con solvencia. Si los taronjas han ganado, no ha sido por su gran juego o por mostrar una superioridad imparable, sino por los continuos errores de un Covirán Granada que en esta jornada no ha aparecido. 20 pérdidas y 4 de 26 en triples, dos factores que explican por qué se ha perdido este encuentro. Ganar este fin de semana hubiese dado alas a los de Pablo Pin tras las derrotas de Betis, Fuenlabrada, UCAM y Girona. Tocará seguir peleando en casa, donde Covirán sí sabe mostrar su mejor versión.
Ficha del partido:
Valencia Basket: Puerto, Webb, Jones, Radebaugh, Dubljevic -quinteto inicial- López-Arostegui, Evans, Hermannsson, Bressan, Claver, Prepeplic, Rivero
Covirán Granada: Renfroe, Niang, C.Díaz, Maye, Tomás - quinteto inicial - J.Díaz, Moore, Caicedo, Bropleh, Iriarte, Ndoye
Parciales: 20-18; 18-16 -descanso- 24,18; 18-20
Incidencias: partido correspondiente a la jornada 23 de la Liga Endesa disputado en la Fuente de San Luis