CSIF denuncia "trato discriminatorio" de ALSA a los trabajadores granadinos de la línea Madrid-Granada

Los delegados del sindicato admiten que “el incumplimiento de cuadrantes de vacaciones o descansos es algo habitual"

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Imagen ilustrativa | Foto: Archivo
Gabinete
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Delegados sindicales de CSIF, sindicato mayoritario en las administraciones públicas y con presencia creciente en el sector privado, han dado a conocer el listado de incidentes que la Dirección de la empresa de transportes ALSA (NEX CONTINENTAL HOLDING S.L.U.) arrastra desde hace tiempo y que afectan a los conductores del centro de trabajo de Granada que cubren la línea de transporte con Madrid, actualmente con 16 personas y 14 autobuses en funcionamiento.

La gestión de esta línea, admiten, “se centraliza desde Madrid y son los técnicos de servicios de la capital los que organizan las rutas imponiendo sus propios criterios de forma unipersonal y dictatorial”. Los delegados de CSIF admiten que “el incumplimiento de cuadrantes de vacaciones o descansos es algo habitual y que el diálogo con el Comité de Empresa es casi inexistente, de modo que las decisiones se toman sin negociación previa”.

Estos hechos ya han sido denunciados en sendas ocasiones ante la Inspección de Trabajo por miembros del Comité de Empresa de Granada, pertenecientes a esta Central Sindical. De este modo, han dejado constancia, además, de las condiciones que sufren los trabajadores de esta línea durante su estancia en la estación de autobuses de Madrid ya que “no se respeta su tiempo de descanso, no se les facilita una sala de descanso para conductores y se les emplaza a realizar tareas distintas a las de su categoría profesional como repostaje y lavado de otros vehículos ajenos a su servicio, teniendo además que realizar largos desplazamientos parar recoger su autobús y continuar su servicio”.

Además, junto a la discriminación en la asignación de turnos y cambios de última hora, los afectados denuncian la contratación de coches (refuerzos) “que no ofrecen los mismos servicios que los oficiales para realizar este tipo de distancias”. Por ello, exigen que la empresa refuerce el personal en vez de abusar de la subcontratación de refuerzos que, en Semana Santa, alcanzan los 17 coches por día.