De tranvías, metros, retrasos, asesores...
La silueta del tranvía -o el metro ligero o como se llame técnicamente- asomó por Caleta en pruebas y rápidamente se sumergió en los túneles que lo llevan soterrado por debajo de la Redonda hasta bien entrado el Zaidín. La imagen de la mañana del jueves traía una metáfora que desandaba hasta junio de 1959, cuando los tranvías fueron 'expulsados' del eje Gran Vía-Reyes Católicos que en esa época marcaba el centro vital de Granada.
Aquel día se borró de la realidad la estampa bucólica del tranvía transitando por el centro, evocativa de una ciudad sosegada donde los pulsos ciudadanos transitaban a ritmos menos estresantes que los actuales. Ahora emergerá por Caleta y hacia Armilla, justo las zonas que mantuvieron hasta 1971 la red de cercanías que funcionaba a satisfacción de usuarios desde 'la capital', como se nombraba a Granada en los pueblos cercanos.
Para eliminar los tranvías bastó un día. Para recuperarlos -parece que en marzo- hemos necesitado años y años de crispación entre administraciones, ha faltado eficacia en la gestión de la obra y ha sobrado impostura para incumplir unos plazos ya en origen desproporcionadamente laxos. Sin ir más lejos, este consejero de ahora, Felipe López, se estrenó en Granada, en junio de 2015, recién designado, alargando la apertura hasta finales de ¡2016!, cuando hasta entonces se había barajado el otoño de aquel mismo año como las fechas en que la infraestructura entraría en servicio.
Pese a estirar un año el compromiso, López no ha podido cumplirlo. ¿Y qué? La Junta, que en autosatisfacción anda sobrada, no ha ahorrado vocablos al calificar de histórica cada jornada en que se clavaba una traviesa, se abría en visita restringida una estación inerte o se ponía a funcionar en pruebas uno de los coches, siempre al ruido de la campana de aviso. Así, este jueves también fue histórico no solo para el consejero y sus conmilitones provinciales de la Junta, también para los cuatros alcaldes, socialistas todos.
Curioso: cuatro a cero en la representación municipal socialista de alcaldes de municipios por donde discurre el trazado. No hace mucho era de dos a dos y hubo tiempos en que el PP ganaba por tres a uno. Debe ser este caso del metro el único partido que remonta el PSOE en toda España... Viendo el desaguisado que montó la Consejería en la organización del evento de prueba esa mañana de jueves uno va entendiendo el porqué de tanto retraso: pusieron un microbús en Fontiveros para que los que se habían citado en Albolote y viajar a bordo del trenecito hasta Granada regresasen a Albolote a recoger sus coches. A ninguno de los muchos asesores que pueblan la Junta se le ocurrió pensar que hubiera sido más práctico y funcional para los ritmos de trabajo y hasta para el medioambiente poner el microbús a primera hora y ahorrar así el triple traslado de ida-vuelta-ida. ¡Así nos va!