Defensa del acusado en 'Romanones' pedirá su absolución y ve en el denunciante "mala fe procesal"
La Fiscalía de Granada ha solicitado nueve años de prisión para único procesado por presuntamente abusar sexualmente de un menor de edad desde el año 2004 hasta 2007
La defensa del padre Román M.V.C., único acusado en el conocido como 'caso Romanones', pedirá su absolución de los abusos sexuales continuados que se le atribuyen y la "expresa condena en costas" al denunciante y supuesta víctima por su "nefasta mala fe procesal".
Según ha informado a Europa Press el letrado que lo representa, Javier Muriel, con el escrito de acusación provisional hecho público este viernes por la Fiscalía de Granada se demuestra "la misma objetividad e imparcialidad" que lleva manteniendo el Ministerio Público "desde el primer momento", cumpliendo con su "jerarquizada labor".
Pero eso, según aclara, no quita que vuelva a "negar rotundamente" los hechos que se le achacan al religioso y, "por supuesto", se opondrá a la calificación provisional solicitando la libre absolución del padre Román M.V.C. "con expresa condena en costas" al denunciante por su "nefasta mala fe procesal".
Además, ha señalado que "cuando esto acabe" la defensa iniciará de "forma contundente" acciones legales "contra todos los testigos que han colaborado con sus falsos testimonios".
La Fiscalía de Granada ha solicitado nueve años de prisión para único procesado por presuntamente abusar sexualmente de un menor de edad desde el año 2004, cuando tenía 14 años y hasta 2007, cuando ya contaba con 17 años.
El inculpado, sacerdote en la parroquia de San Juan de Vianney, en el barrio del Zaidín, en Granada, al que el fiscal le atribuye un delito de abuso sexual continuado, agravado por el resultado de acceso carnal, se enfrenta además al pago de 50.000 euros en concepto de daño moral a su supuesta víctima, de la que tendría que responder subsidiariamente el Arzobispado de Granada.
Según consta en el escrito de acusación provisional del Ministerio Público, al que ha tenido acceso Europa Press, el religioso aprovechó su "situación de ascendencia moral" sobre el joven para someterlo a tocamientos o abusos sexuales, tanto en la casa parroquial inicialmente, como en las viviendas en las que el grupo de sacerdotes liderados por Román M.V.C. pasaban sus periodos de descanso, en Los Pinillos, en Cenes de la Vega, y en Salobreña.