Sin calefacción y con las ventanas abiertas: el invierno que afrontan los alumnos del Andrés Segovia

La comunidad educativa del CEIP Andrés Segovia de Granada -padres y dirección del centro- sueña con que el Puente de Todos los Santos sea el último sin calefacción. De lo contrario, Halloween será una broma comparada con el invierno que les espera a los alumnos de este colegio situado en la zona sur de la capital. El problema, la caldera. Está rota desde enero. Mes en el que notificaron este problema a las autoridades obteniendo el lanzamiento de pelota al tejado del de enfrente como respuesta.

El colegio depende de la Junta, pero la administración autonómica respondió al requerimiento de la AMPA Amanecer que el mantenimiento era tarea del Ayuntamiento de Granada. Sin llegar a negarlo del todo, el Consistorio matizó que ese mantenimiento sólo incluye la labor de peritaje periódica, pero en ningún caso el arreglo de desperfectos. Ahora, tras nueve meses de idas y venidas, al fin han conseguido una respuesta de la Delegación Territorial de Educación. Desde la Consejería cuya representante provincial es Ana Berrocal la respuesta es que la caldera se arreglará. Eso sí, en marzo.

"¿De qué nos sirven? Los niños cuando van a pasar frío es ahora que llegan los meses duros. Sobre todo teniendo que tener las ventanas abiertas", explica Patricia Prieto, presidenta del AMPA Amanecer de este centro. Y es que la fácil transmisión del Covid-19 obliga a los colegios e institutos a ventilar todas las aulas al menos una vez cada hora. Algo que se hará si cabe más duro para los alumnos a partir de diciembre. "Llevamos insistiendo desde febrero y volvimos a hacerlo en junio, no entendemos por qué ahora dan de plazo hasta marzo si se trata de una obra menor que no requiere de concurso de licitación", añade a su queja.

Los padres y madres del Andrés Segovia se plantean ya no llevar a los niños al colegio al colegio como primera medida de protesta. "Hay padres que ya lo están haciendo. La caldera está picada. Dicen que el habitáculo ya ni siquiera cumple con las medidas reglamentarias mínimas de seguridad. Cuando se rompió nos dijeron que no se podía arreglar. El Ayuntamiento nos trajo dos radiadores y con las ventanas cerradas no servían ya, imagínate ahora que estarán abiertas. Un alto porcentaje del alumnado ya faltó el año pasado", advierte. Y es que, para colmo, Prieto recuerda que llevan tres años pidiendo que se cambien las cristaleras de un edificio ya bastante antiguo.

De momento ya han aprovechado el fin de semana de Halloween para manifestarse con disfraces bajo el lema 'Susto o muerte'. Tratan así de llamar la atención sobre el grave problema que afecta a este colegio público de la capital granadina. GranadaDigital se ha puesto en contacto con la Delegación Territorial de Educación, que se remite a una orden de aprobación por parte de la Agencia Pública Andaluza de Educación. "Aprobación del programa de necesidades. Iniciamos la contratación del proyecto. Se va a intentar agilizar todo lo posible", resume el texto de forma telegráfica.