Desarticulada una banda organizada que estaría dedicada al robo de catalizadores de vehículos
Cada componente del grupo tendría diferentes funciones establecidas por la organización, desde la captación de otros miembros hasta las labores de vigilancia
Agentes de la Policía Nacional han desarrollado la 'Operación Platino' en la que han desarticulado una banda organizada formada por cuatro varones de diversas nacionalidades, española, rumana y venezolana, de entre 19 y 27 años, solo uno de ellos con antecedentes policiales, asentados en el barrio granadino del Zaidín, quienes, desde el mes de mayo, se habrían especializado en la sustracción de catalizadores de vehículos estacionados en la vía pública. Los agentes han detectado al menos 28 robos de estas piezas y han intervenido numerosas herramientas específicas utilizadas para las sustracciones, tanto en el interior de un local descubierto en el mismo barrio, como en poder de uno de los detenidos in fraganti.
Miembros del grupo criminal con un reparto de tareas preestablecido y herramientas específicas
Desde el pasado mes de mayo los agentes detectaron un aumento en las denuncias por la sustracción de piezas de automóviles, concretamente los catalizadores, que se producían en el barrio del Zaidín, principalmente de madrugada, mientras los vehículos se encontraban estacionados en la vía pública sin la presencia de sus usuarios.
Paralelamente tuvieron conocimiento de la existencia de grupos especializados y perfectamente coordinados en la sustracción y posterior venta de este tipo de piezas, dado el valor que se obtiene de ello tanto en empresas de reciclaje como en el mercado de segunda mano. El interés deriva del valor de las piezas en sí mismas y también en el de los metales que contienen. Estas bandas organizadas suelen perpetrar este tipo de robos utilizando las herramientas necesarias como son gatos hidráulicos para elevar los vehículos, introduciéndose bajo los mismos el individuo que corta las piezas, en colaboración con, al menos una tercera persona que realiza labores de vigilancia. Todo ello tras la adquisición de los conocimientos necesarios para realizar las técnicas requeridas. Por otro lado, la repercusión económica para los perjudicados y propietarios de los vehículos es mucho mayor que el beneficio obtenido por los presuntos delincuentes, ya que la sustitución de cada pieza sustraída puede oscilar entre los 300 y los 1.600 euros, dependiendo del modelo de vehículo.
Los agentes han localizado un inmueble situado en los bajos de un edificio ubicado en el mismo barrio que se estaría utilizando para depositar sus herramientas y, de manera momentánea, los catalizadores sustraídos, lugar donde se ha recuperado uno de ellos. Fruto de la investigación ha sido también la detención de uno de los presuntos miembros de este grupo cuando, al parecer, se disponía a sustraer un catalizador, estando el vehículo elevado con un gato hidráulico y la pieza donde se aloja el catalizador acababa de ser cortada.
Han sido numerosas las herramientas especializadas que han incautado, como varios gatos hidráulicos y mecánicos, una sierra de corte eléctrico de batería, numerosas hojas de sierra y otros utensilios que se presumen utilizados para perpetrar las 28 sustracciones detectadas.