Desarticulada una banda acusada de grafitis en trenes de Granada y Málaga y daños de hasta 100.000 euros
La investigación tuvo como punto de inflexión los hechos denunciados por unas pintadas en unos vagones de la Estación de Santa Ana, en Antequera, donde unos encapuchados fueron sorprendidos por unos vigilantes de seguridad
La Policía Nacional ha detenido a cuatro jóvenes, de edades comprendidas entre 19 y 26 años, todos ellos residentes en la provincia de Granada, por su presunta participación en los delitos de daños y pertenencia a grupo criminal en relación con los daños y perjuicios causados tras realizar varios grafitis en distintos trenes a su paso por localidades de Málaga y Granada.
Los investigadores han esclarecido seis denuncias por hechos similares acontecidos entre los meses de marzo y octubre del año pasado, en las estaciones de tren de Antequera y Álora (Málaga), así como en las instalaciones de Fonelas (Granada) y los talleres de Granada. El montante de los daños asciende a 100.000 euros, según ha informado la Policía Nacional a través de un comunicado.
La investigación tuvo como punto de inflexión los hechos denunciados por unas pintadas en unos vagones de la Estación de Santa Ana, en Antequera, donde unos encapuchados fueron sorprendidos por unos vigilantes de seguridad cuando los primeros pintaban un tren de media distancia, estacionado en la vía izquierda de la estación, en sentido Córdoba.
A pesar de que los autores de los grafitis lograron huir campo a través, en plena madrugada, olvidaron varios efectos que a la postre resultaron claves para el esclarecimiento de los hechos, como una cámara de fotos, un teléfono móvil, 18 botes de spray de pintura y útiles de escalada. Las pesquisas llevaron a los agentes a la identificación de un grupo de jóvenes afincados en distintas localidades de Granada en relación con las pintadas.
DESTROZOS
Para acceder a las instalaciones, vías, talleres o cocheras, normalmente en horario nocturno, ocasionaban daños en verjas perimetrales de seguridad, puertas de acceso y tejados, al objeto de realizar sus grafitis.
Además, los jóvenes adoptaban grandes medidas de seguridad y evitaban ser captados por cámaras de vigilancia. Cuando no tenían más remedio que exponerse a las mismas, ocultaban su rostro con gorros o prendas similares.
Los investigadores han podido constatar cómo los detenidos actuaban de manera organizada. Así, mientras algunos de ellos realizaban los grafitis en los vagones, otros desarrollaban labores de vigilancia o bien grababan las pintadas con sus teléfonos móviles. Posteriormente difundían sus acciones a través de internet y redes sociales.
La investigación se centró en poder identificar la identidad de las personas que se encontraba detrás de las firmas con las que los grafiteros rubricaron sus pintadas. Los agentes detuvieron a final de abril a cuatro jóvenes en relación con los daños ocasionados en los trenes de varias estaciones de Málaga y Granada, esclareciendo seis denuncias por hechos similares.
Además del deslucimiento por los grafitis, los vagones afectados tuvieron que ser sustituidos por otros para ser reparados, interrumpiéndose el servicio ordinario de transporte de viajeros. Si se suman los daños ocasionados en todos los casos atribuidos a esta banda de grafiteros, el montante asciende a 100.000 euros.