Desazón en la EASP por su integración en el Instituto de Salud de Andalucía: "Es despreciar 40 años de una institución líder"
Desde la escuela señalan que la aprobación del Proyecto de Ley para la creación del nuevo ente certifica "la crónica de una muerte anunciada”
El Consejo de Gobierno aprobó este martes el Proyecto de Ley para la creación del Instituto de Salud de Andalucía, un nuevo ente que fusiona la Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP) y la Fundación Pública Andaluza Progreso y Salud. La Junta de Andalucía asegura que esta decisión contribuye a "reordenar los principales entes instrumentales con los que cuenta la Junta de Andalucía en materia de formación, gestión del conocimiento y de investigación en salud". Fuentes profesionales de la EASP aseguran a GranadaDigital que este paso "es despreciar 40 años de una institución líder". Por otro lado, Pablo Sánchez, presidente de su comité de empresa, y Joan Carles March, docente y exdirector de la escuela, expresan sus impresiones sobre la situación y el futuro del centro.
“El transcurso de todo esto es largo y todavía le queda”, advierte Pablo Sánchez. El portavoz sindical asegura que no ha habido conversaciones con el Gobierno andaluz y denuncia “dejadez y desprecio a la representación de los trabajadores”. “La semana pasado hubo un consejo de administración y no nos comunicaron nada”, afirma. Asimismo, Sánchez muestra su preocupación porque en el Proyecto de Ley aprobado "se habla explícitamente de la disolución de la Escuela Andaluza de Salud Pública”. "No nos lo han remitido todavía", insiste. Además, apunta que el Proyecto de Ley “dice que son puestos de trabajo ‘a extinguir'", una condición que considera negativa para la estructura de la EASP y su futuro. "Nunca una fusión genera empleo", lamenta.
Uno de los puntos en los que el miembro de UGT hace hincapié es en que la nueva entidad creada "no tiene mucho que ver con la salud pública”. La Junta ha recalcado que todos los profesionales de la EASP conservarán su puesto de trabajo, pero el presidente del comité de empresa se pregunta qué pasará "si nosotros no tenemos cabida en nuestra disciplina, que es la salud pública y la gestión sanitaria, cuando "se empiecen a desarrollar los reglamentos del futuro instituto". Pablo Sánchez asegura también que “en el presente no se cumplen las condiciones laborales y profesionales de los empleados”.
"Crónica de una muerte anunciada"
Pablo Sánchez declara que “el primer año de la anterior legislatura ya hicieron una proposición de ley y no pudieron”. El representante sindical califica la integración de la EASP en el nuevo Instituto de Salud de Andalucía como una "crónica de una muerte anunciada" porque “estaban obcecados en terminar con la escuela”. "Han ido haciendo mella, generando discordia y dejadez en la dirección", apostilla.
"La tendencia en algunos sitios es descentralizar, pero aquí se centra en Sevilla. Podemos hablar de la gestión de la Alhambra o la del Parque de las Ciencias", critica el portavoz. Asimismo, incide en que son "uno de los pocos centros colabores de España con la OMS". "Eso se va a romper con el cambio de CIF. Perdemos proyección internacional. Esta es la única escuela de salud pública que queda en España y la disuelven. Esto es muchísimo más. Es pérdida de retorno económico y visibilidad. Hay alumnos que vienen, por ejemplo, de Latinoamérica", defiende.
Este lunes, la sede de UGT en Granada acogerá una rueda de prensa del comité de empresa, en el que también está presente CCOO, en la que anunciarán decisiones y la posible convocatoria de concentraciones. Así lo afirma Pablo Sánchez, que detalla que el secretario general de UGT Granada, Luis Miguel Gutiérrez, y el secretario general de UGT Andalucía, Óskar Martín, trasladaron a la alcaldesa Marifrán Carazo la necesidad de "defender Granada" ante la "pérdida de una institución de prestigio" que ha causado "un nivel de desesperanza considerable".
Fuentes profesionales del centro aseveran que "no se creía en la escuela" desde el Ejecutivo autonómico, pues argumentan que durante la pandemia no se "hizo uso" de ella para aspectos como la composición del "equipo de expertos" o tareas de "vigilancia epidemiológica". "La escuela ha perdido ambiente, vida y futuro tras romper las dinámicas de una institución abierta", sostienen.
Joan Carles March ensalza la importancia de la salud pública
Una voz autorizada dentro de la EASP es Joan Carles March. El balear de adopción granadina llegó a ser director de la escuela y ha estado presente en numerosos proyectos. "La escuela nació como una sociedad pública, algo que permitió dar una autonomía de la escuela para favorecer avances en el sistema sanitario", recuerda el profesor.
“En un entorno como la pandemia hemos visto la importancia de la salud pública como eje fundamental para resolver los problemas que nos vienen. Necesitamos unas instituciones de salud pública cada vez más fuertes y mayor peso”, asegura Joan Carles. El docente recuerda que durante las etapas más fuertes del Covid-19 "se hizo un gran esfuerzo y un gran trabajo”. El investigador es un defensor de la "unidad" en torno a la candidatura granadina para acoger la Agencia Estatal de Salud Pública, pero ve "incompresible" que al mismo tiempo se integre la EASP en "un paquete".
La Junta comunicó este martes que "la forma jurídica más apropiada para el nuevo ente debe ser la de Agencia Administrativa", una "opción escogida por los principales organismos públicos de investigación de ámbito estatal, como el Instituto de Salud Carlos III". Joan Carles March declara que este propósito "podría ser bueno, pero no tiene sentido hacerlo a costa de una institución que durante 40 años ha sido referente a nivel nacional".