Desde la Conferencia Episcopal se pide “justicia” sobre los presuntos abusos
“Deseamos que se esclarezca la verdad para que no vuelvan a ocurrir hechos tan graves como los que se contemplan”
Manrique Pascual
Después de que el Juzgado de Instrucción 4 de Granada levantase el secreto de sumario sobre el denominado caso ‘Romanones’, en el que diez sacerdotes y dos seglares de Granada están siendo investigados por presuntos abusos sexuales a varios menores, las reacciones no se han hecho esperar.
Desde la Conferencia Episcopal Española, su secretario general y portavoz, José María Gil Tamayo, ha expresado una total confianza y “respeto” de la Iglesia española en el dictamen judicial en relación a estos casos. “La justicia tiene la última palabra”, ha asegurado Gil Tamayo, que se ha mostrado convencido de que esta investigación contribuirá a esclarecer estos hechos.
En ese sentido ha querido hacer hincapié en que “nosotros hemos de seguir trabajando para evitar hechos como los que contempla el auto hecho público por el juez”.
También ha recordado que la Conferencia Episcopal no tiene competencia para decidir sobre la continuidad del arzobispo de Granada en su cargo, y que en este caso “es el Santo Padre el que debe discernir sobre la cuestión”, aunque ha querido dejar claro que el prelado granadino tiene “la cercanía de todos sus hermanos obispos”.
