Detenida una joven por simular la sustracción de su teléfono móvil

Supuestamente lo había vendido a una casa de compra-venta y, con la denuncia presentada, solicitó a su compañía telefónica otro terminal de similares características

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oto: Archivo GD
E.P.
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La Policía Nacional ha detenido a una joven de 19 años y sin antecedentes policiales por supuestamente simular la sustracción de su teléfono móvil, cuyo hurto del bolso había denunciado.

La joven, que posteriormente resultaría detenida, se personó en Comisaría y denunció que cuando se encontraba en una cafetería de la localidad de Motril (Granada) un individuo le sustrajo el teléfono móvil que portaba en el interior de su bolso al descuido y dijo que ignoraba quién pudo haber realizado dicha acción.

Iniciadas las comprobaciones por parte de los policías pertenecientes al Grupo de Policía Judicial de Motril encargados de investigar la denuncia, comprobaron que el hecho denunciado revestía caracteres de haber sido simulado, pudiendo determinar que los hechos podrían haber ocurrido de forma diferente a lo manifestado en la denuncia, según ha informado la Policía en un comunicado.

Supuestamente lo había vendido a una casa de compra-venta por 140 euros y, con la denuncia presentada, solicitó a su compañía telefónica otro terminal nuevo, ya que lo tenía asegurado, por lo que le proporcionaron otro de similares características.

Verificados ciertos extremos de la investigación, y tras comprobar indicios de falsedad en los hechos motivadores de la denuncia presentada, los agentes detuvieron a la joven y la pusieron a disposición judicial.

La Policía ha destacado que estas conductas suponen una distracción de las funciones de prevención y persecución del delito que tiene encomendada la Policía Nacional, además de un perjuicio para la sociedad y va en detrimento de las verdaderas victimas de hechos delictivos.

Debido al incremento en los últimos años de estos ilícitos penales, la Jefatura Superior de Policía de Andalucía Oriental ha establecido un protocolo para reclamar los gastos ocasionados por los simuladores de hechos delictivos, que de media están alcanzando de 200 a 1.000 euros y que, cuando la autoridad judicial lo estima ajustado a derecho, son reclamados a los autores de estos hechos.