Detenido en Granada un joven acusado de adquirir un ordenador robado valorado en 1.200 euros
El portátil fue recuperado en un establecimiento donde, en un primer momento, negaron tenerlo y, posteriormente, manifestaron haberlo recepcionado como empeño
Agentes de la Policía Nacional han detenido en Granada a un varón de 23 años de nacionalidad peruana sin antecedentes policiales como presunto autor de un delito de receptación sobre un ordenador valorado en 1.200 euros, cuya sustracción, del interior de un vehículo, había sido previamente denunciada por su propietario.
El portátil fue recuperado en un establecimiento donde, en un primer momento negaron tenerlo y, posteriormente, manifestaron haberlo recepcionado como empeño, pero sin aportar dato alguno de la persona que lo entregó. Pero el detenido era el hijo del propietario del comercio, según ha informado la Policía Nacional.
Los policías recibieron una denuncia en la que un varón informaba del robo de su maleta de viaje con efectos y un ordenador portátil. El suceso había tenido lugar durante el día mientras su vehículo, que no presentaba daños, se encontraba estacionado en el interior de un garaje situado en el distrito Centro de la ciudad.
Con posterioridad al robo, su propietario había localizado virtualmente el portátil en un comercio de dispositivos electrónicos situado en el mismo distrito donde le negaron tenerlo. Tras llevar a cabo diversas gestiones, los agentes personados en el establecimiento, contactaron con su propietario.
Finalmente, habría reconocido que el portátil se encontraba en el local y que, en un principio, desconocía que su hijo lo había adquirido en modo empeño. Por su parte, el joven habría confirmado las manifestaciones de su padre y, "al solicitarle la identidad de la persona que lo había empeñado, dijo no haber tomado nota alguna sobre su filiación, contraviniendo lo legalmente establecido en dicha materia".
Ante las circunstancias descritas, el hijo fue detenido como presunto responsable de la adquisición de un producto sin garantía alguna de su legal procedencia ni sobre la identidad de su propietario, el portátil fue devuelto, y el joven pasó a disposición judicial.