Detenido un joven como presunto autor de 12 robos con fuerza en vehículos
Reclamado por dos juzgados de Granada para que ingresara en prisión, actuaba en vehículos estacionados en aparcamientos de grandes centros comerciales o de bares de carretera
La Guardia Civil, en el marco de la operación Carpesty, ha conseguido detener a un delincuente muy activo, un individuo de 26 años de edad que actualmente reside en un barrio de la zona norte de Granada, con numerosos antecedentes policiales, como presunto autor de 12 robos con fuerza en interior de vehículos perpetrados entre los meses de septiembre y noviembre de 2018, y también por un delito contra la seguridad vial por conducir sin permiso de conducción.
Este individuo, además, estaba reclamado por dos juzgados de Granada para que ingresara en prisión; y por el Cuerpo Nacional de Policía de Antequera porque se le estaba buscando por 6 robos más perpetrados en esa localidad.
El detenido estaba especializado en el robo en interior de vehículos estacionados en aparcamientos de grandes centros comerciales o de bares de carretera. Llegaba con su vehículo, que conducía sin haber obtenido nunca el permiso de conducir, hasta dicho aparcamiento y controlaba a todo el que llegaba. Cuando veía entrar a los ocupantes al establecimiento sabía que disponía de varios minutos para apoderarse de cuanto de valor hubiera dentro del vehículo; aunque apenas necesitaba poco más de 30 segundos para romper una de las ventanillas y apoderarse de una maleta un bolso o, lo que es más grave, de hasta 7 escopetas de caza que sus propietarios habían dejado dentro del coche mientras tomaban café.
El día 9 de noviembre por la mañana, la Guardia Civil de Maracena consiguió detener a este individuo cuando merodeaba por el aparcamiento de un centro comercial del municipio de Pulianas. Los agentes del Área de Investigación de este puesto vigilaban dicho aparcamiento desde hacía algunas semanas, después de identificarle tras una serie de robos allí cometidos gracias a las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad, al tener el convencimiento de que volvería a intentar robar.
El detenido tras su paso por los calabozos de la comandancia de Granada y después por el juzgado de guardia, ha ingresado en prisión.