La dirección de la Alhambra, entre el perfil técnico que prefiere Bernal o la apuesta del PP de Granada por uno local
La decisión sobre el nuevo máximo responsable del monumento se conocerá este viernes tras 102 días de gobierno en funciones
En medio de la vorágine electoral de los últimos meses, la gestión de la Alhambra se ha convertido en un cuello de botella para la Junta de Andalucía. Será este viernes cuando el Pleno del Patronato elija definitivamente al nuevo director o directora del monumento, poniendo así fin a 102 días de gobierno en funciones. Tras la designación, el nuevo responsable deberá ser nombrado por el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía, previsiblemente cuatro días después, el martes 18 de julio, según los plazos que se manejan y los detallados por el consejero Arturo Bernal.
Tal y como ha podido saber GranadaDigital, en la mente del responsable autonómico de Turismo, Cultura y Deporte está instalada la firme convicción de que la persona que dirija los designios del monumento debe corresponderse con un perfil de marcado carácter técnico, en lugar de político, y nombrado desde Sevilla. Una decisión que no gusta en absoluto a la plana mayor del Partido Popular de Granada, que desde que entró en San Telmo ha centrado sus esfuerzos en capitalizar la idea de que la Alhambra y Sierra Nevada deben ser gestionadas desde Granada.
Así, los tira y afloja entre la dirección provincial del PP y el gabinete del consejero Bernal explicarían la dilatación por espacio de tres meses de esta decisión. Un desencuentro que ha abierto un intenso debate en el seno del partido y que podría provocar un distanciamiento entre las partes si no se halla una solución consensuada que contente a todos los actores implicados. El posible cuórum podría pasar por designar a alguien de perfil técnico, pero nacido o radicado política o profesionalmente en Granada. No obstante, esta alternativa no está garantizada aún.
En declaraciones recientes a los medios, Arturo Bernal, quien podría tener ya la decisión tomada, se ha mostrado confiado de que la persona que se ponga al frente de la Alhambra será la "adecuada para dicho puesto", e incluso se atrevió a avanzar que será "un candidato aplaudido y reconocido", aunque evitando siempre desvelar nombre alguno. Las críticas de la oposición ha sabido sortearlas en este tiempo. Y pese al largo periplo sin una cabeza visible en las oficinas del recinto amurallado, el consejero ha descartado "desatención o falta de trabajo".
"Estamos trabajando en la selección del mejor perfil posible y no hay ningún elemento que se pueda poner encima de la mesa objetivamente que ponga de manifiesto una desatención aparente de las cuestiones de la Alhambra. Todo va operativamente según tiene que ir y estamos, como digo, en la selección del mejor candidato posible y seguramente va a ser un candidato aplaudido y reconocido. El proceso está prácticamente a punto de terminar", incidió Bernal la semana pasada. Proceso que coincidió en calificar de "largo".
Fue Antonio Peral, arquitecto conservador del recinto, quien tomó las riendas en funciones de la Alhambra el 3 de abril, una vez Rocío Díaz fue designada consejera de Fomento en sustitución de la ahora alcaldesa de Granada, y en aquel momento candidata, Marifrán Carazo. Desde entonces, el mutismo ha sido la moneda común en los corrillos en torno a esta decisión, con denuncias de la oposición incluidas por la falta de mando en el que es uno de los principales baluartes de Granada.
Será este viernes cuando por fin se despeje la incógnita, poniendo fin así a más de 100 días de incertidumbre. Y con el nombre, muy probablemente también se intuirán los equilibrios internos que, sea como fuere, lo importante es que resulten en el mejor candidato, la mejor gestión y el mejor resultado posible para la Alhambra y Granada. La capital y la provincia.