Empresas del sector agroalimentario reafirman su apuesta por la sostenibilidad de la mano de Cajasur

La sostenibilidad medioambiental ocupa un espacio creciente entre las preocupaciones de la sociedad actual. La cuestión abarca a todos los estratos sociales, desde la acción ciudadana individual hasta las administraciones públicas. Pero también a las empresas. Cómo las organizaciones incorporan los procesos de creación circulares a sus modelos productivos representa hoy en día una diferencia cualitativa para muchos consumidores finales que no puede pasarse por alto. Ya no se trata sólo del compromiso con el medio ambiente y el mundo que nos rodea, sino de cómo la elaboración repercute en la salud del usuario. Algo que en el sector agroalimentario se hace más patente que nunca.

Conscientes de todo lo anterior, en Cajasur –entidad perteneciente al grupo Kutxabank— llevan apostando desde hace más de una década por el desarrollo sostenible en lo referente, sobre todo al I+D+i. El banco cordobés es pionero en políticas relacionadas con la sostenibilidad en toda España. Y para ponerlo en valor, están celebrando en colaboración con GranadaDigital la Semana de la Sostenibilidad. Ese ha sido el marco en el que se ha desarrollado el #DirectosEnRedGD que este martes ha reunido en pantalla a Antonio García, director de Banca de Empresas e Instituciones en Granada y Almería de Cajasur; Enrique Herrera, vicerrector de Investigación y Transferencia de la Universidad de Granada; Jesús García, consejero delegado del Grupo La Caña; Jaime Abad, director general de Herogra, y Sheila Villalobos, directora de la Fundación Supermercados Covirán.

En tres de los casos se trata en todos los casos de empresas agroalimentarias que, en colaboración con Cajasur, apuestan por líneas de negocio sostenibles. A ellas hay que sumar la propia entidad y también la UGR, que fomenta el programa Inncuba de detección temprana de necesidades e incubación de proyecto de I+D+i, especialmente en pymes. La charla se ha estructurado en tres bloques. Un primero en el que Juan Prieto, director de GranadaDigital, ha pedido a los invitados que expliquen la relación de las organizaciones que representan con el programa Inncuba, el segundo para analizar la sostenibilidad dentro de la cadena agroalimentaria y un tercero abierto al debate en el que el periodista Miguel López ha trasladado a los presentes algunas inquietudes de los lectores a través de las redes sociales.

Programa Inncuba

Ya en materia, y tras recordar Antonio García la importancia de establecer vínculos de “concienciación con la sociedad” y de “mantener un presente que mejorará nuestro futuro y el de nuestros hijos”, Enrique Herrera ha avanzado en qué consiste el programa Inncuba, al que ya están acogidos La Caña y Herogra y al que Covirán piensa adherirse en un futuro cercano. El vicerrector de Investigación y Transferencia de la UGR ha explicado que es un programa nacido de la Fundación Cajasur y que tiene como objetivo “llevar acciones de emprendimiento y de transferencia a las empresas desde la universidad para poder resolver problemas en la sociedad”.

Inncuba se está implementando este año en dos convocatorias con una muy buena acogida y un personal docente con especial sensibilidad en estas temáticas que las encauza a través de las enseñanzas de grado y posgrado, tratando de buscar “el desarrollo a través de posibles startups o empresas con líneas futuras de acción en ese ámbito”. En este sentido, Antonio García ha añadido que “la idea embrionaria es dotar de fondos a la universidad a través de sus fundaciones”, que en la entidad cordobesa son dos: la Fundación Cajasur y Convisur. Esta última, una promotora de viviendas de VPO con proyectos ya en La Chana y Albayda de la capital.

El consejero delegado de La Caña, Jesús García, ha desarrollado algunos de los proyectos de su grupo nacidos al albor de esta iniciativa. Entre ellos, destaca el estudio del impacto de las altas presiones en los productos de quinta gama basados en el tomate, “fundamentalmente para ver cómo podíamos mejorar desde el punto de vista organoléptico y microbiológico de cara a obtener una mayor calidad”. “Incorporamos una persona de la universidad que continuó en prácticas y que se ha quedado incorporado dentro de la plantilla del equipo de Calidad del grupo”, ha desarrollado antes de recordar que “eso demuestra que un programa como este permite solucionar problemas que tiene la empresa y que tiene la economía apostando por el trabajo que pueden hacer los nuevos investigadores y también cómo incorporarlos a la actividad productiva”. El siguiente paso, una línea de investigación similar con el pepino.

Por su parte, Jaime Abad, director general de Herogra, ha subrayado los encuentros con grupos de investigación enmarcados en el programa Inncuba que han tenido lugar en las instalaciones de su grupo en Albolote. “Hicimos una propuesta para mejorar las propiedades humectantes de los fertilizantes foliares de alta carga iónica. Recibimos varias propuestas y seleccionamos aquella que mejor respondía a nuestra necesidad, que ha mejorado y patentado una gama importante para nosotros de fertilizantes foliares que tiene una formulación única, consiguiendo un gran efecto agronómico”, ha dicho.

El bloque lo ha cerrado Sheila Villalobos en representación de la Fundación Covirán, quien ha agradecido el poder escuchar a todos sus compañeros “porque queremos conocer este plan con más detalle y reflexionar un poco”. “Podemos analizar y comprobar que han tenido un resultado satisfactorio. Trabajamos con muchos aspectos, pero sobre todo con la innovación social. Es algo muy flexible y estamos deseosos de conocer más de cerca esta apuesta de la Universidad de Granada y Cajasur”, ha sentenciado Villalobos.

Sostenibilidad dentro de la cadena de producción

Respecto a la sostenibilidad dentro de la cadena agroalimentaria desde la producción, el tratamiento y la distribución hasta la llegada al cliente final, Jesús García ha puesto en valor la idea de sostenibilidad de “intentar producir más y mejor con los menos recursos posibles e intentando contaminar lo menos posible”. “Para llevarlo a efecto tenemos tres líneas. La primera enfocada a la producción, que afecta a los agricultores y a los técnicos que están en el día a día. Otra que afecta a las instalaciones y logística, mejorando la eficiencia de nuestros procesos productivos, y una última enfocada al mercado, que consiste en darle valor añadido a ese trabajo que la cadena está realizando en los productos”, ha resumido.

Jaime Abad ha querido hacer hincapié en que la estrategia sostenible de Herogra no se basa “en que esté de moda, sino que lo hacemos por puro convencimiento, y prueba de ello es que fuimos la primera empresa en el sector de los fertilizantes en certificarnos bajo la norma ISO 14001 ya en 1999”. “Desde entonces vigilamos que nuestros procesos cumplan con todo eso, con auditorías internas y externas, y fundamentamos nuestra estrategia en dos pilares: uno enfocado al proceso industrial, con la instalación de placas solares fotovoltaicas, y otro, ya manifestado al Ministerio de Transición Ecológica, de desarrollar un proyecto para producir hidrógeno verde a partir de energía solar fotovoltaica, con una inversión de 1,7 millones de euros”, ha apostillado Abad. Todo lo anterior permitirá a Herogra ahorrar unos seis millones de kilovatios por hora al año y evitará la emisión de unas mil toneladas de CO2 a la atmósfera.

Sheila Villalobos ha felicitado en este punto a las otras dos empresas agroalimentarias y ha hecho hincapié en lo complejo que se hace cuando pasan los años adaptar el modelo a las exigencias externas y a las propias internas. Sobre las aportaciones de Covirán, Villalobos ha puesto el acento en el aprovechamiento de las cubiertas de las plantas de la cadena para la creación de bosques fotovoltaicos, la gestión de procesos para el análisis y la reducción de los plásticos o la optimización de las cargas de transporte. Y de ahí a los puntos de venta: “El producto no sólo tiene que llegar a los puntos de venta, sino también redistribuirlo. Estamos continuamente aprendiendo de todos”. La directora de la Fundación Covirán ha analizado cómo la cadena sostenible abarca desde la plataforma-distribución hasta el cliente y el punto final y ha querido enfatizar el proyecto de “puntos de venta responsables” que lleva a cabo la cadena de supermercados. “Hemos condensado todas las políticas de responsabilidad social en la gestión de un negocio; teniendo en cuenta los residuos, la cadena del frío y sobre todo la mentalidad en la gestión, porque podemos tener un conocimiento fantástico y unos protocolos estupendos, pero sin gestión o hay nada”, ha rematado.

Por último, Enrique Herrera, uno de los mayores expertos de España en inteligencia artificial además de vicerrector de la UGR, ha reiterado todo lo anterior, al tiempo que ha dado peso “a la responsabilidad tan importante que la universidad tiene con la responsabilidad social” y sembrar esa preocupación en los alumnos. “Desde el punto de vista de investigación, lo que intentamos es que nuestros grupos innoven para adaptar sus productos e iniciativas. Como responsable de la UGR en este tema, creo que no sólo hay que dar consejos, sino buscar recursos y medios”, ha explicado antes de recordar importantes proyectos que tiene la institución académica como la participación en el proyecto del acelerador de partículas o la pretensión de “crear un ecosistema de inteligencia artificial con empresas como Indra” en Granada.

Conclusiones y preguntas de los lectores

Los lectores de GranadaDigital han manifestado a través de las redes sociales su interés en la temática abordada. Algunas inquietudes han girado en torno a los procesos circulares de producción del Grupo La Caña en productos como el aguacate, el proyecto de incluir hidrógeno verde con energía solar fotovoltaica en Herogra, la importancia de que una empresa granadina con implantación internacional como Covirán apueste por la sostenibilidad, la generación de modelos de oportunidad en la UGR o los Préstamos Verdes con los que Cajasur ofrece suculentas ventajas a aquellas empresas dispuestas a apostar por el medio ambiente.

Respecto a esta política sostenible a todos los niveles de la entidad perteneciente a Kutxabank, una pregunta ha sido la más formulada. ¿Tienen traslado a empresas más pequeñas o que están empezando? ¿Qué líneas de ayuda verde hay para esas corporaciones? El director de Banca de Empresas e Instituciones en Granada y Almería de Cajasur, Antonio García, las ha disipado: “En el programa Inncuba no sólo tenemos grandes empresas, sino que ha tenido dos partes: aquellas empresas que tenían ya su departamento de I+D, pero también otras que han experimentado una iniciación al I+D. Por eso insistimos en que es la UGR, a través de la Oficina de Transferencia, pero que nosotros queremos dar cabida a cualquier empresa que tenga una iniciativa y pueden contactar con nosotros a través de nuestros canales habituales o de la propia universidad”. A modo de conclusión final, García se ha congratulado de poder demostrar que la innovación “no sólo está en los libros, las noticias o en Estados Unidos con nombres extraños”.