Dolores que causan las nuevas tecnologías

Estas afecciones, que causan malestar, son una consecuencia directa del estilo de trabajo actual

datos moviles tablets
Foto: Archivo GD
Avatar for Manrique PascualManrique Pascual
0

El estilo de vida actual, asociado al uso de las nuevas tecnologías, ha elevado el número de malestares y dolores asociados a uso del smartphone, el teclado del ordenador, el uso del mando a distancia... Algunas de ellas son tensión muscular, mareos, dolores o hasta visión borrosa.

Estas afecciones, que causan malestar, son una consecuencia directa del estilo de trabajo actual y responden a la cantidad de horas que se está en la oficina, a una mala iluminación, a las posturas incorrectas que adoptamos cuando usamos el teléfono o el ordenador y también al uso excesivo de determinados dispositivos y aplicaciones móviles.

Soluciones para los principales males derivados del uso de las nuevas tecnologías

Estos son los problemas más comunes y las posibles soluciones o precauciones que puede haber para evitarlos.

Dedo en gatillo por uso excesivo del smartphone

Certos estudios aseguran que miramos el móvil más de 150 veces al día, lo que obliga a realizar una serie de movimientos continuos con la mano al consultar teléfonos móviles, tablets o incluso consolas. Estas costumbres producen lo que los especialistas denominan el dedo en gatillo, un agarrotamiento de los pulgares. Chasquearlos evita molestias, pero también existen tratamientos para relajar esta zona y liberar las posibles tensiones.

Tendinitis de muñeca por uso del teclado

Cuando se apoyan las muñecas en la mesa de una oficina, se suele producir tensión en los tendones de la muñeca. Esto es lo que ocurre al trabajar con el teclado en cualquier tipo de dispositivo. También ocurre cuando se usa el móvil tumbado en la cama, con los codos apoyados. Esta postura hace que se "duerman" las manos y se produzcan contracturas en el cuello.

Las contracturas del sofá

Aunque se es consciente de que conviene estar con la espalda recta, es poco común tener una postura adecuada cuando se está en un sofá. Todo el mundo tiende a estar recostado en lugar de sentado, haciendo que una situación cómoda pueda generar contracturas, sobre todo en la parte media de la espalda en zonas, por ejemplo, en torno a los omóplatos. Hay que ser conscientes de que no siempre las posiciones más confortables son necesariamente positivas para los músculos, produciendo en muchas ocasiones vicios que llevan a sufrir incómodas contracturas.

Las tensiones de las malas posturas en el trabajo

Ocho horas diarias en una oficina llevan siempre un punto en el que uno no está sentado adecuadamente. Estas incorrecciones posturales suelen producir dolores y tensiones que, si acaban convirtiéndose en contracturas, pueden inducir a la aparición de síntomas como mareos o visión borrosa, sobre todo si se sufre de sensibilidad en el área cervical. Para evitarlo, conviene seguir una serie de claves que responden a la denominada ergonomía en la oficina. De este modo, se debe estar por ejemplo con los hombros relajados, la cabeza recta, la espalda y las piernas haciendo un ángulo de 90º y con el borde superior del monitor a la altura de los ojos.