Dormir hace que nuestros recuerdos estén más accesibles
La principal diferencia se produjo entre el momento de haber visto las palabras por primera vez y 12 horas más tarde
Investigadores del Centro Vasco del Conocimiento, el Cerebro y el Lenguaje y la Universidad de Exeter (Reino Unido) han descubierto que dormir no solo protege a la memoria sino que la hace más accesible, tras observar que tras unas horas de sueño es más fácil recordar cosas o situaciones pasadas.
Según los resultados publicados en la revista 'Cortex', en las dos situaciones en que los sujetos eran incapaces de recordar información tras 12 horas de vigilia fue suficiente con una noche de sueño para recuperar el acceso a su memoria que en principio parecía haberse debilitado.
En el trabajo, se pidió a los participantes que trataran de recordar una serie de palabras inventadas que habían aprendido antes de una noche de sueño, en un periodo equivalente a una vigilia. Y se les pidió que las recordaran inmediatamente después de haberlas visto y, posteriormente, tras otro periodo de sueño o de no dormir, en ambos casos después de 12 horas.
La principal diferencia se produjo entre el momento de haber visto las palabras por primera vez y 12 horas más tarde, pero entre estos dos últimos casos vieron que dormir ayudó a rescatar recuerdos imposibles de recordar más que la falta de sueño.
En concreto, según ha explicado Nicolas Dumay, de la Universidad de Exeter, el sueño casi duplicó las posibilidades de recordar palabras que previamente habían sido imposible de recordar, lo que sugiere que "algunos recuerdos se agudizan durante la noche".
"Esto apoya la idea de que, durante el sueño, ensayamos activamente información marcada como importante", reconoce este experto, que no obstante cree que deben seguir investigando para saber si, por ejemplo, esto permite que los recuerdos estén más accesibles en diferentes contextos.
Este experto cree que el impulso de la memoria viene del hipocampo, una estructura interna del lóbulo temporal, que descomprime episodios recientemente codificados y los reproduce en regiones del cerebro originalmente involucrados en su captura.
"El sueño no sólo protege los recuerdos contra el olvido, sino que también los hace más accesibles", ha destacado