Eduardo de Teresa: “Lo que más ha cambiado el curso de la historia han sido las enfermedades, las guerras y el sexo”

El doctor Eduardo de Teresa pronunció una conferencia en el Colegio de Médicos de Granada

Javier de Teresa, a la derecha
Avatar for Román CallejónRomán Callejón
0

“Lo que más ha cambiado el curso de la historia han sido las enfermedades, las guerras y el sexo”. Así se manifestaba ayer el doctor Eduardo De Teresa Galván en la conferencia que pronunció en el Colegio de Médicos de Granada. Eduardo de Teresa, médico humanista que “desde los siete años oía música clásica”, según dijo de él su hermano y presidente del Colegio de Médicos Javier de Teresa, comenzó su disertación hablando de la Guerra de Secesión americana y dijo que, entre otras circunstancia, es posible que el general sudista Lee perdiera la batalla de Gettysburg , que cambió el curso de dicha guerra, porque tuvo un infarto que le imposibilitó seguir la contienda. De Mozart dijo que murió de una enfermedad a los 41 años y que el mundo, debido a esa muerte, perdió muchas obras geniales del músico porque falleció en pleno momento creativo. Para el doctor De Teresa, jefe de Cardiología del Carlos Haya de Málaga y profesor de Medicina, ha habido epidemias como la peste negra que acabó con el 60 por ciento de la población europea, “lo que sin duda influyó en lo que pasó después en el mundo, ya que hubo una selección natural y quedaron los más fuertes”. Igualmente en la guerra civil americana más de la mitad de los muertos (casi un millón) no fueron por las balas, sino por la disentería. Sobre la importancia del sexo en el devenir de la historia dio ejemplos como cuando los franceses enviaron a sus prostitutas que podían contagiar la sífilis a los invasores alemanes durante la segunda guerra civil, “lo que para mí fue de las primeras guerras bacteriológicas”, ironizó.

El doctor De Teresa salpicó de anécdotas y curiosidades su disertación y llegó a decir que grandes epidemias han hecho posible que se inventaran instrumentos que luego han sido claves en la historia, como la imprenta. También aludió a la Religión como determinante a la hora de prohibir o perseguir el sexo, “más que nada por cuestiones sanitarias y para evitar enfermedades. La Religión ha sido un instrumento para mejorar costumbres”, añadió.