El agua de la lluvia inunda los invernaderos en Carchuna pero no causa destrozos en las plantaciones

El agua de la lluvia que cayó la madrugada del martes en la costa de Granada inundó una docena de invernaderos --entre cuatro y cinco hectáreas-- en Carchuna (Motril) tras la rotura de un muro de contención que no pudo aguantar la presión del agua en una rambla cercana pero no ha causado destrozos en las fincas ni en las plantaciones.

Así lo ha asegurado a Europa Press el secretario provincial de COAG Granada, Miguel Monferrer, quien ha explicado que "el pepino cultivado aún está pequeño, por lo que, al filtrar la tierra el agua, no tiene por qué haberlo dañado", aunque ha especificado que habrá que esperar "entre diez y doce días para comprobar que no se ha dañado la raíz".

"El agua era limpia, no tenía barro y no cubrió más de una cuarta desde el suelo por lo que es poco probable que se pierdan los cultivos", ha especificado Monferrer quien ha afirmado que durante la tarde del martes acudió con los técnicos hasta los invernaderos afectados y la tierra, que es arena, ya había filtrado todo el agua".

La rambla se desbordó, según ha explicado el secretario provincial de COAG Granada, porque la boca de desagüe "es muy pequeña para la cantidad de agua que se acumuló" pero estaba "limpia" por lo que no "ha habido arrastres que hayan causado destrozos en los invernaderos".

Para concluir, Miguel Monferrer ha aclarado que Carchuna es muy llana e, incluso, algunos de los invernaderos están construidos por debajo del nivel del mar lo que, unido a la cantidad de agua que cayó y que el anillo de desagüe de la rambla es pequeño, provocó que las fincas se llenaran anegaran.