El Albergue de los Campos de Otero se resiste a caer en el olvido

Los muros del albergue de Campos de Otero soportan el peso de más de cien años, y este tiempo no pasa en balde. Después de muchos años olvidado, la Sociedad de Sierra Nevada, decidió que las historias ocultas de este lugar y las venideras no podían acabar.

Nos son muchos los albergues que se encuentran en este paraje natural y es algo que se muestra imprescindible para un montañero y de lo que se lamentan. Si bien es cierto que la historia ha sido dura para los inicios de estos refugios y que últimamente están mejor preparados, el cuento no ha cambiado tanto y aun se tiene que trabajar en ellos.

La Sociedad de Sierra Nevada se fundó en 1912 y lleva desde entonces trabajando por la conservación del paraje natural y lo que allí se encuentra.  Desde hace ya algún tiempo, estos amantes de la montaña pelean por recuperar la antigua vida de este lugar.

Según cuenta Manuel Hernández Linares, secretario general de la sociedad, llevan ya casi un año creando el proyecto para rehabilitar el albergue, pero tan solo hace unos días que se lanzó al público.

La recaudación del dinero se está haciendo mediante un sistema llamado crowdfunding. Este sistema es una fuente de financiación por la cual reciben aportaciones de particulares que ayudan a la causa.

En este momento llevan recaudados en torno a ochocientos euros Manuel Hernández explica que “en estos cuatro días ha subido mucho, aunque parezca poco, la gente aporta cantidades pequeñas y llegar a esta cantidad es porque han participado muchas personas”.

“Estamos tocando puertas oficiales esperando que alguno se solidarice con la causa y nos ayude a cumplimentar lo que consigamos del crowdfunding” añade Manuel Hernández.

La rehabilitación completa del albergue se estima que cueste unos 74.000 euros. El objetivo que se marcan como prioritario es cubrir con esta fuente de financiación los ocho mil euros necesarios para las reparaciones urgentes de la cubierta. Después, según se vaya recaudando, se seguirán haciendo el resto de reparaciones.

“Se trata del refugio de todos los montañeros” cuenta Manuel Hernández “se encuentra en un sitio estratégico desde donde se puede ir al Mulhacén y a cualquier otro punto de la Sierra”.

Al Albergue han acudido personas muy relevantes del mundo del montañismo como Antonio Lizancos, Paco Almedo Roderas, Enrique Perea o Juan Espinos entre otros. Este refugio tiene mucha historia entre sus cimientos que llevan más de un siglo en pie.